Por: Enrique Villegas
(ZENIT Noticias / Bogotá, 04.01.2022).- La tarde europea del viernes 4 de febrero las etiquetas “Papa” y “Bergoglio” han sido tendencias en Twitter tanto en América del sur como en algunos países europeos como Italia. En la inmensa mayoría de los casos, ambas etiquetas están asociadas a la audiencia que Francisco concedió el pasado miércoles 2 de febrero (no reportada por el boletín oficial de actividades del Papa, el que publica la Sala de Prensa de la Santa Sede) al candidato izquierdista a la presidencia de Colombia, Gustavo Petro. Esta práctica es habitual en este pontificado. Al parecer la razón es no visibilizar algo que el Papa quiere mantener en el ámbito de la intimidad.
Sin embargo, la confianza y gentileza del Pontífice no parecen haber quedado correspondidas por la instrumentalización que de la audiencia especial se ha obtenido. Después de todo hay elecciones en Colombia en marzo de 2022 y de un encuentro de este tipo se puede obtener réditos electorales.
Fue el Petro el que a través de Twitter comenzó a evidenciar el encuentro desde el 2 de febrero: ese día realizó dos tuits con alusiones a la audiencia y el jueves 3 parece que no resistió las ganas de confirmar desde Twitter lo que un día antes había adelantado:
“Le regalé al Papa Francisco un libro que precisamente muestra con estadística, como el país tiene una de las peores inequidades del mundo en concentración de la tierra fértil para producir alimentos pero que queda improductiva y solo se usa como sinónimo de poder”.
Contraste la cantidad de tuits sobre el encuentro cuando en uno de ellos, también del 3 de febrero, afirma:
“Hice el compromiso de no comentar públicamente mi conversación con el Papa Francisco del que ya he leído sus dos encíclicas: «Laudato Si» y «Fratelli Tutti» que les recomiendo. La absolución de un dirigente político siempre pasará por su compromiso profundo con el pueblo”.
El viernes 4 de febrero Petro se encontraría con un líder socialista de la izquierda española: José Luis Rodríguez Zapatero, defensor del régimen chavista. En España ha encontrado a líderes comunistas como Yolanda Díaz el partido de izquierda radical Unidas Podemos.
La audiencia del Papa a un líder de izquierda en un contexto de elecciones no cayó bien en el Parlamento Colombiano desde donde un sector pidió a la vicepresidenta colombiana protestar por el encuentro, por medio del embajador ante la Santa Sede. Tampoco al presidente colombiano le cayó bien el encuentro. De hecho, en declaraciones recogidas por Caracol TV el líder del ejecutivo de Colombia dijo: “soy una persona de fe, yo soy católico. Tengo gran respeto por el papa Francisco. Creo además que el papa Francisco tiene todo menos intereses electorales en nuestro país”.
Y añadió:
“que haya personas que estén buscando acercarse a Dios, me parece que si él los recibe en privado -como lo ha puesto él en las reglas y es que no se le haga ninguna promoción-, pues todo el que se quiera acercar a Dios, para una persona que es la máxima autoridad de una iglesia, pues debe ser algo que por alguna razón lo considerará. Lo que uno espera es que el que se quiera acercar a Dios también sea capaz de confesar sus pecados”.
Petro habría acudido a este encuentro privado acompañado de la señora Verónica Alcocer, su cónyuge. Según el equipo de prensa de Prensa, “La conversación giró alrededor del problema y la búsqueda de solución a la violencia en el país y el papel de liderazgo que asumiría Colombia en el contexto Latinoamericano para poder consolidar el esfuerzo y superación de la crisis asociada al cambio climático». Ya en 2015, como alcalde de Bogotá, Petro tuvo un encuentro con el Papa.
