(ZENIT Noticias / Roma, 28.03.2023).- Se ha dado a conocer el famoso QS World University Rankings en su edición 2023. De ese rankeo mundial se desprende un dato relevante: ninguna de las universidades pontificias de Roma se encuentra en uno de los 140 lugares reportados en el rubro de «teología, divinidad y estudios religiosos» para el año 2023.
De hecho, para estudiar teología, la universidad católica mejor rankeada es la Universidad de Notre Dame en los Estados Unidos, que ocupa el primer lugar. Hay otras universidades católicas en los siguientes lugares:
10 Boston College (Estados Unidos)
23 Universidad Católica de Lovaina (Bélgica)
33 Pontificia Universidad de Comillas (España)
Home of the Comillas Pontifical University in Madrid (Spain). Building from 1908.
34 Universidad Católica de Australia (Australia)
35 Universidad de Navarra (España)
40 Universidad Católica de América (USA)
47 Universidad de Georgetown (USA)
49 Universidad de Fordham (USA)
Entre 51 y 100
- Pontificia Universidad Católica Argentina (Argentina)
- Pontificia Universidad Católica de Chile (Chile)
- Universidad Católica del Sagrado Corazón (Italia)
Entre 100 y 140
- Pontificia Universidad Javeriana (Colombia)
- Pontificia Universidad Católica de San Pablo (Brasil)
- Universidad de Santa Clara (Estados Unidos)
- Universidad de Los Andes (Chile)
Estos datos indican varias conclusiones: la primera es que la universidad italiana con la mejor posición es la del Sagrado Corazón de Milán. Otro dato es que, por pertenencia, las universidades mejor rankeadas en teología, en ámbito católico, son de jesuitas o del Opus Dei. Finalmente, el rankeo evidenciaría que Estados Unidos sería el mejor país para estudiar teología católica y que Europa ya no es el continente con las mejores universidades católicas en materia de teología.
Desde 2007, bajo Benedicto XVI, la Santa Sede impulsa el así llamado AVEPRO: se trata de la Agencia de la Santa Sede para la Evaluación y Promoción de la Calidad de las Universidad y Facultades Eclesiásticas. La agencia se ocupa de promover y desarrollar una cultura de calidad al interior de las instituciones académicas dependientes de la Santa Sede para asegurar criterios cualitativos válidos a nivel internacional.
