(ZENIT Noticias / Lisboa, 01.08.2023).- Calles repletas, júbilo entre los jóvenes y gran emoción es lo que se vivió en el primer día de la 38 Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa. En cualquier plaza pública, parque o parroquia se verían las miles de playeras de la JMJ y banderas de diversos países del mundo.
Por la mañana, más de 4 mil jóvenes del Regnum Christi celebraron el Encuentro Internacional en el «Parque da Quinta das Conchas e dos Lilases». Iniciaron en punto de las 9:30 de la mañana con la hora eucarística con un impresionante silencio y clima de oración ante el Santísimo. La música de Kenósis RC España animó la oración.
Al concluir la bendición con el Santísimo, los jóvenes tuvieron momentos de encuentro, convivio y diversión con el concierto de Kayrós que viajaron desde Guadalajara, México para celebrar la fe antes miles de jóvenes del RC así como legionarios, Consagradas y Consagrados del Regnum Christi.
De México participaron más de 900 jóvenes de ambos territorios (México y Centroamérica / Norte de México) los cuales convivieron con otros participantes de Alemania, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Estados Unidos, Eslovaquia, España, Filipinas, Francia, Hungría, Italia, Polonia y Venezuela.
Al concluir el Encuentro internacional los jóvenes del Regnum Christi se trasladaron a la Misa de Apertura en el Parque Eduardo VII en la Colina do Encontro donde miles de personas se reunieron para dar inicio a la 38 Jornada Mundial de la Juventud.
Durante la homilía, el Cardenal Manuel Clemente, Patriarca de Lisboa, dio la bienvenida a todos los participantes. «Bienvenidos también en la amplitud ecuménica, Inter religiosa y de buena voluntad que guardan estos días y que hoy nos reúnen».
La misa que se celebra es de la Visitación de Nuestra Señora, y que es el lema general de la Jornada: María se levantó y partió sin demora al encuentro de Isabel. «Es un paso evangélico que nos incluye también a nosotros», mencionó.
El Cardenal refirió que, al decirle al Papa Francisco el lema de la Jornada: María se fue a prisa… él le dijo: «de prisa, pero no con ansiedad». Su mensaje a los jóvenes fue: «Estar con prisa pero sin angustia, como quien comparte lo que tiene».
Al concluir la Celebración Eucarística el ambiente se llenó de júbilo, bailes, porras y banderas de todos los países del mundo.
