Edward McNamara, LC
(ZENIT Noticias / Roma, 19.11.2024).- Respuesta del Padre Edward McNamara, Legionario de Cristo, profesor de liturgia y teología sacramental y director del Instituto Sacerdos de la Universidad Pontificia Regina Apostolorum.
P: ¿Puede un diácono participar en la lectura de la Plegaria Eucarística? — C.M., Ciudad de México
R: La respuesta corta es muy sencilla: no.
Este tema está muy bien tratado en la instrucción Redemptionis Sacramentum, de 2004, sobre los abusos en la liturgia. A saber:
«52. La proclamación de la Plegaria Eucarística, que por su misma naturaleza es el punto culminante de toda la celebración, es propia del Sacerdote en virtud de su Ordenación. Por tanto, es un abuso proferirla de tal modo que algunas partes de la Plegaria eucarística sean recitadas por un diácono, un ministro laico, o por un fiel individual, o por todos los fieles juntos. Por tanto, la Plegaria eucarística debe ser recitada íntegramente por el sacerdote solo.
«53. Mientras el sacerdote proclama la Plegaria eucarística, «no debe haber otras oraciones o cantos, y el órgano u otros instrumentos musicales deben estar en silencio», a excepción de las aclamaciones del pueblo debidamente aprobadas, como se describe a continuación.
«54. El pueblo, sin embargo, participa siempre activamente y nunca de manera meramente pasiva: pues ‘se une silenciosamente al Sacerdote en la fe, así como en sus intervenciones durante el curso de la Plegaria Eucarística según lo prescrito, a saber, en las respuestas en el diálogo del Prefacio, en el Sanctus, en la aclamación después de la consagración y en el ‘Amén’ después de la doxología final, y en otras aclamaciones aprobadas por la Conferencia Episcopal con el recognitio de la Santa Sede.’»
Por tanto, por lo visto anteriormente, sólo un sacerdote puede proclamar cualquier parte de la Plegaria Eucarística.
La aclamación después de la consagración, proclamada por el pueblo, no viola esta regla. Esto se debe a que esta aclamación no es, estrictamente hablando, una parte de la Plegaria Eucarística.
En efecto, si un sacerdote celebra solo, o concelebra sólo con otros sacerdotes, tanto el «misterio de la fe» como la aclamación se omiten, y el sacerdote pasa inmediatamente de «Haced esto en memoria mía» a «Así, pues Padre…» o «Así, al celebrar…», según la Plegaria Eucarística que se utilice.
Esta misma regla se aplicaría cuando otras aclamaciones del pueblo han sido insertadas en la Plegaria Eucarística con la aprobación de la Conferencia Episcopal y de la Santa Sede. Es el caso, por ejemplo, de la versión portuguesa del misal utilizado en Brasil.
Otra particularidad es Alemania, donde el misal prevé que el diácono pueda entonar el «Misterio de la fe». Esta posibilidad no está prevista en el misal latino ni en ningún otro misal que yo conozca, pero parece haber sido aprobada para Alemania.
Como vimos anteriormente, no entraría en contradicción con los principios generales, ya que esta invitación no forma parte de la Plegaria Eucarística como tal.
* * *
Los lectores pueden enviar sus preguntas a zenit.liturgy@gmail.com. Por favor, pongan la palabra «Liturgia» en el asunto. El texto debe incluir sus iniciales, su ciudad y su estado, provincia o país. El Padre McNamara sólo puede responder a una pequeña selección del gran número de preguntas que le llegan.
Gracias por leer nuestros contenidos. Si deseas recibir el mail diario con las noticias de ZENIT puedes suscribirte gratuitamente a través de este enlace.