(ZENIT Noticias – Observatorio de Bioética de la Universidad Católica de Valencia / Valencia, 21.11.2024).- Según un estudio publicado el pasado mes de septiembre en la revista de la Sociedad Europea de Cardiología, los niños nacidos por reproducción asistida tienen un riesgo mayor de sufrir cardiopatía congénita que los concebidos de forma natural.
El estudio, realizado en los países nórdicos con una muestra de 7,7 millones de niños nacidos vivos, incluyó 171.735 niños nacidos por reproducción asistida.
En comparación con otros estudios, en este se demuestra una incidencia superior de cardiopatía congénita en los niños nacidos tras utilizar técnicas de reproducción asistida frente a los nacidos sin utilizar estas técnicas.
Los niños nacidos de embarazos múltiples, tuvieron mayor riesgo de padecer cardiopatías congénitas, independientemente de su forma de concepción, pero la tecnología de reproducción asistida se asoció también con un mayor riesgo en los fetos únicos.
Se detectaron cardiopatías severas en 3.159 niños nacidos por reproducción asistida (1.84%) y en 86.824 (1.15%) en los nacidos tras concepción natural.
Aunque muchos de los niños con problemas cardíacos sobreviven a su enfermedad, durante sus vidas adultas los problemas coronarios persisten.
Como factores de riesgo coronario están, referidos a la gestante: edad, tabaquismo, obesidad, diabetes y el consumo de drogas durante el embarazo.
Las anomalías cromosómicas y otros factores genéticos también predisponen a padecer cardiopatías congénitas.
Además, las mujeres con antecedentes de cardiopatías tienen un riesgo elevado de que sus hijos padezcan cardiopatías congénitas.
Se requiere de más investigación para determinar si la detección con ecocardiografía fetal, además de la detección prenatal de rutina podría reducir la mortalidad de los fetos con cardiopatías.
La detección prenatal ofrece la posibilidad de terapia fetal o una planificación especializada del parto, pero sigue siendo controvertida y puede ocasionar ansiedad y un coste elevado para los padres.
Los estudios también muestran una fuerte asociación entre la preeclampsia y las cardiopatías congénitas, especialmente en la preeclampsia de aparición temprana y grave.
Los embarazos gemelares, especialmente los monocoriónicos (en la que los gemelos comparten una única placenta), son los que se asocian con un mayor riesgo de padecer cardiopatías congénitas.
Las conclusiones del estudio son:
- Las cardiopatías congénitas son graves pero poco frecuentes.
- Hay mayor incidencia en personas nacidas por reproducción asistida y se dan principalmente en niños nacidos tras embarazos múltiples.
- Se recomienda la transferencia embrionaria de un solo embrión para evitar los riesgos relacionados con los embarazos múltiples.
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