(ZENIT Noticias / Ciudad del Vaticano, 28.11.2024).- El 27 de noviembre, el Secretario de Estado de los EE. UU., Antony Blinken, se reunió con el Papa Francisco en el Vaticano como parte de una gira diplomática europea más amplia destinada a abordar crisis globales críticas. Si bien el Vaticano se mantuvo en silencio sobre los detalles de su audiencia privada, el Departamento de Estado de los EE. UU. reveló que las discusiones giraron en torno al conflicto en curso en Medio Oriente, la guerra en Ucrania y los esfuerzos de ayuda humanitaria.
Fortalecimiento de los lazos diplomáticos
Según se informa, Blinken recordó sus «maravillosos recuerdos» de su reunión anterior con el Papa Francisco en junio de 2021, enfatizando la continuidad del diálogo entre Washington y la Santa Sede. Esta relación duradera subraya las preocupaciones compartidas sobre la paz y la justicia globales, y ambas partes priorizan la diplomacia como una vía para la resolución de conflictos.
La reunión tuvo lugar en el contexto de un alto el fuego recientemente negociado entre Israel y el Líbano, un avance significativo en el volátil Medio Oriente. Blinken también destacó la importancia de abordar el costo humanitario de la invasión rusa a Ucrania, una crisis que ha desplazado a millones de personas y ha agotado los recursos internacionales.
Discusiones de alto nivel en el Vaticano
Además de su audiencia con el Papa, Blinken mantuvo conversaciones detalladas con el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, y el arzobispo Paul Gallagher, secretario de Relaciones con los Estados. Sus conversaciones profundizaron en las medidas prácticas para promover la paz en Ucrania y fortalecer los esfuerzos humanitarios internacionales.
El Vaticano, con su papel histórico como intermediario moral y diplomático, sigue siendo un actor fundamental en el fomento del diálogo en regiones plagadas de guerra e inestabilidad. La visita de Blinken reafirmó el aprecio de los Estados Unidos por las contribuciones del Vaticano a las iniciativas de paz global.
El contexto del G7: una misión diplomática más amplia
La parada de Blinken en el Vaticano se produjo en medio de la Reunión de Ministros de Asuntos Exteriores del G7 en Italia, donde las principales democracias abordaron desafíos globales urgentes. Del 23 al 27 de noviembre, los líderes se centraron en las guerras en Ucrania y Oriente Medio, la seguridad en la región del Indopacífico y las crisis en curso en Haití y Sudán.
El G7, presidido este año por Italia, reiteró su apoyo inquebrantable a Ucrania, incluidas las sanciones sostenidas a Rusia. La postura unificada del grupo subraya su compromiso más amplio con la defensa de los valores democráticos y la estabilidad internacional.
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