(ZENIT – Roma, 25 Mar. 2017).- El santo padre Francisco al dirigirse a los habitantes del barrio de las ‘Case Bianche’, les agradeció: “Son ustedes quienes me reciben en Milán y esto esto un gran don para mi: entrar en la ciudad encontrando rostros, de las familias y una comunidad”.
Agradeció también la estola que le regalaron, confeccionada artesanalmente en una cooperativa del barrio.
“Me recuerda que vengo aquí en medio de ustedes como sacerdote” dijo, y el regalo de la estola hecha artesanalmente la vuelve más preciosa y recuerda que el sacerdote cristiano “está al servicio del pueblo” y los sacerdotes aquí “son un don de Cristo tejido por ustedes, por la gente, con su fe, sus fatigas, sus oraciones y sus lágrimas”.
También agradeció el regalo del cuadro de la imagen de la Virgen María cómo estaba antes y ahora restaurada.
“Sé que en Milán me recibe la ‘Madonnina‘ en la cima del Duomo (catedral), pero con vuestro regalo la Virgen ya me recibe aquí”. Como María que corre a recibir a Elisabeth, como la solicitud de la Iglesia que no se queda esperando, sino que va a encontrar a todos, también a los no cristianos y no creyentes… y lleva a Jesús hacia todos, que es el amor de Dios hecho carne”.
Y comentando el restauro de la imagen de la Virgen, señaló que “la Iglesia tiene necesidad siempre de ser restaurada, porque está conformada por nosotros que somos pecadores”. Exhortó así: “Dejémonos restaurar por Dios, por su misericordia, dejemonos limpiar el corazón, especialmente en este tiempo de cuaresma”.
Señaló por ello que una buena confesión a todos nos hará bien. Y concluyó deseándoles que el Señor les bendiga y pidió que recen por él.
El Papa en Milán en la periferia 'Case Bianche' (Fto. Osservatore © Romano)
Francisco en 'Case Bianche': estoy aquí como sacerdote y ellos son un don de Cristo para ustedes
Le regalan una estola realizada artesanalmente y un cuadro de la imagen restaurada de María del oratorio del barrio