(zenit – 5 junio 2020).- La COVID-19 no muestra signos de declive en América Latina, particularmente en Brasil y México, países que se mantienen al alza en el número de contagiados y fallecidos, a pesar de que los mandatarios ya apunten a llevar a cabo una desescalada en las medidas de contención del coronavirus.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió recientemente que la curva de contaminación del nuevo virus sigue aumentando drásticamente en América y que es demasiado pronto para detener la cuarentena. Toda la región de América Latina es actualmente el epicentro mundial de la pandemia.
De manera especial, la OMS manifestó su preocupación por Brasil, que tiene el epicentro en São Paulo: con 210 millones de habitantes, es el país más poblado de Latinoamérica y el quinto del mundo, pero ya es el segundo del globo en contagios tras Estados Unidos.
Este viernes, 5 de junio de 2020, se convierte en el tercer país con más fallecimientos a causa del coronavirus. Estados Unidos y Reino Unido ocupan el primer y segundo puesto en el ranking que ofrece la Universidad John Hopkins, y se mantiene como el segundo país con mayor número de contagios en el mundo, por detrás de Estados Unidos.
El país registra 34. 021 muertes según las estadísticas de la universidad estadounidense (solo el miércoles, 3 de junio, se registraron 1.349, según anunció el Ministerio de Salud) y 614.941 personas infectadas. En consecuencia, incluso los Estados individuales, cada día, establecen nuevos registros.
Brasil, sin ministro de Salud
Mientras tanto, la tensión política continúa en el país entre el gobierno central del presidente Jair Bolsonaro y el de los estados regionales de Deisingoli. Bolsonaro, con el apoyo del Ministerio de Economía y de la Fiscalía General, ha decidido cancelar un fondo, creado por el Parlamento, destinado a los gobernadores-alcaldes para luchar contra la pandemia, anuncia L’Osservatore Romano con fecha del 5 de junio.
Brasil lleva tres semanas sin ministro de Salud y no parece que Bolsonaro tenga prisa en nombrar uno. Tras la dimisión de Nelson Teich que, al igual que su predecesor, Luiz Henrique Mandetta, dejó la cartera por la actitud del mandatario, el ministerio sigue provisionalmente en manos de un militar, el general Eduardo Pazuello.
México
Según el informe de John Hopkins, México presenta la cifra de 105.680 contagios, junto a 12.545 muertes por COVID-19.
Con epicentro en su capital, México tuvo el miércoles 1.092 muertos, causando alarma pues el día anterior habían sido medio millar. Sin embargo, el presidente del Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, salió ayer a desdramatizar, alegando que el abultado salto se debió a “un ajuste en defunciones que se habían presentado con anterioridad y no se habían registrado” y sostiene que el virus disminuye y es partidario de reabrir paulatinamente las actividades, lo que llama “nueva normalidad”.
La ONU pide una “vacuna del pueblo”
El secretario general de la Organización para las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, ha pedido una “vacuna del pueblo” contra la COVID-19 que, una vez desarrollada, esté al alcance de todos los habitantes del planeta. Lo hizo ayer, durante una cumbre virtual de recaudación de fondos para la Alianza para la Vacunación (GAVI).
La enfermedad de COVID-19 es la mayor crisis de salud pública de nuestra generación y por ahora no existe una vacuna que lo prevenga, pero cuando la haya “será necesario un espíritu solidario mundial que garantice que toda la gente pueda obtenerla”, advirtió António Guterres.
El objetivo de la cita –superado con creces– en la que participaron 52 países y 35 jefes de gobierno, era recaudar 6.600 millones de euros para que la GAVI pueda vacunar en los próximos cinco años a 300 millones de niños en países en desarrollo de enfermedades como la difteria, el sarampión o la fiebre tifoidea. También pretendía recaudar 2.200 millones de euros para la producción y distribución de una posible vacuna contra el coronavirus.