Al celebrar la santa misa, durante la visita pastoral en la Parroquia San Antonio de Padua, en Jesús María, el domingo 19 de agosto, el purpurado peruano indicó que gracias a Dios se ha movilizado la gente para colaborar; y al mismo tiempo, hemos levantado los ojos a Dios, diciéndole: «Ten misericordia, acompaña a nuestros hermanos y acoge a esos hermanos nuestros fallecidos».
«Con nuestros hermanos del sur que han perdido seres queridos, que están sin vivienda, que están pasando momentos de aflicción mantengamos esa unidad como buenos hijos de Dios en la Iglesia Católica», añadió.
Asimismo, dijo que debemos levantar con confianza el corazón al Señor, que es un padre amoroso, tierno, misericordioso y sabe más que nosotros; y también la movilización del espíritu de oración y ayuda material.
Señaló también que todas las colectas que se realizarán en la misas de las parroquias de la Arquidiócesis de Lima, de este domingo pasado y del próximo, 26 de agosto, serán para «estos hermanos nuestros que lo han perdido todo».
Comentó que ante la situación que viven los damnificados por el terremoto debemos actuar con obras y de verdad la dimensión de la caridad.
El cardenal Juan Luis Cipriani pidió a los fieles seguir colaborando con los sacerdotes, seguir rezando de manera especial por los hermanos de esos lugares tan golpeados y seguir muy unidos en la familia, «que es una Iglesia pequeña».