CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 29 agosto 2007 (ZENIT.org).- Benedicto XVI alzó su voz este miércoles para denunciar los atentados contra el patrimonio ambiental, en particular los incendios, que están destruyendo enormes zonas de muchos países.
Al mismo tiempo, el Papa, al final de la audiencia general celebrada en la Plaza de San Pedro, manifestó su cercanía a las víctimas de estas tragedias y de catástrofes naturales.
«En estos días, algunas regiones geográficas son devastadas por graves calamidades: me refiero a las inundaciones en algunos países orientales, así como a los desastrosos incendios den Grecia, en Italia, y en otras naciones europeas», dijo el Santo Padre.
«Ante emergencias tan dramáticas, que han causado numerosas víctimas e ingentes daños materiales, es un deber preocuparse ante el comportamiento irresponsable de quienes ponen en peligro la incolumidad de las personas y destruyen el patrimonio ambiental, bien precioso de toda la humanidad», denunció.
«Me uno a quienes justamente condenan estos actos criminales e invito a todos a rezar por las víctimas de estas tragedias», concluyó.
En los últimos días, en Grecia, los incendios han provocado 63 muertos.
Según las últimas cifras aportadas por las Cáritas de países asiáticos, los monzones se han cobrado 1.800 vidas en la India, más de 150 en Bangladesh y casi un centenar en Nepal. Otros países duramente golpeados han sido Corea del Norte y Pakistán.
