LIMA, miércoles, 29 agosto 2007 (ZENIT.org).- «Conocer a Jesús es el mejor regalo que puede recibir cualquier persona», destacó monseñor José Luis Lacunza Maestrojuan, O.A.R., obispo de David y presidente de la Conferencia Episcopal de Panamá, durante su intervención en la segunda jornada de ponencias que se desarrollan en el Congreso Teológico del IX Congreso Eucarístico Nacional.
En este día, dedicado a la juventud, el prelado se refirió al tema de la «Misión del Discípulo», tema que en un primer momento lo iba a desarrollar Monseñor Jorge Jiménez Carbajal, arzobispo de Cartagena (Colombia), pero que por motivos de salud no pudo hacerse presente en este Congreso.
En su discurso, Monseñor Lacunza Maestrojuan, resaltó que haber encontrado a Cristo es lo mejor que nos puede ocurrir en la vida y llegarlo a conocer con nuestras palabras y obras es nuestro gozo. Sin duda esta misma alegría es vivida por los discípulos, indicó.
«El discípulo que esta fundamentado en la Palabra de Dios se siente impulsado a llevar esa buena nueva, ese gozo a todos sus hermanos y hermanas» afirmó el Obispo, subrayando que «el discípulo en la medida que conoce y ama a su Señor experimentará la necesidad y urgencia de compartir con otros hermanos su alegría y gozo de haber sido elegido y de haber sido enviado».
Por otro lado, durante su intervención Monseñor José Luis Lacunza, tuvo un especial recuerdo para con las víctimas del terremoto del pasado 15 de agosto, que sacudió con más fuerza las localidades de Ica, Pisco y Cañete; y anunció que las diócesis panameñas realizarán una colecta para ayudar a atender a los damnificados por el sismo.