JEREZ, jueves, 30 agosto 2007 (ZENIT.org).- Publicamos el artículo que ha escrito monseñor Juan del Río Martín, obispo de Jerez, con motivo de la publicación en España del libro «Jesús de Nazaret» de Joseph Ratzinger-Benedicto XVI.
El volumen ya está apareciendo en segunda edición, después de que se agotara en un solo día la primera, según informa «La Esfera de los libros», la casa editorial que lo está distribuyendo.
EL CAMINO INTERIOR DE BENEDICTO XVI
Por fin el pasado 28 de agosto, después de unos meses de retraso con respecto a la primera edición italiana, se ha publicado en España el libro del Papa: «Jesús de Nazaret». Comenzó a redactar el texto en el verano del 2003 siendo aún cardenal Joseph Ratzinger, y la ha terminado siendo obispo de Roma.
Es una obra de madurez de un gran creyente que es, teólogo e intelectual de primer orden a escala mundial. Se trata de una bellísima síntesis de meditación, reflexión y observaciones, desde el mundo actual acerca del núcleo esencial del mensaje cristiano: Jesucristo, Hijo de Dios vivo. El mismo confiesa que «ha intentando presentar al Jesús de los Evangelios como el Jesús real, como el `Jesús histórico’ en sentido propio y verdadero…Jesús no es un mito… no es un rebelde ni un liberal…es una figura histórica sensata y convincente». Es la primera vez que un Papa sale a la palestra tocando sin miedos ni complejos el tema de más calado teológico y espiritual que encierra el cristianismo. No estamos ante un libro divulgativo, sino de pensamiento, que lleva al lector a plantearse las grandes cuestiones de ayer y de hoy.
El texto comienza con el prólogo donde trata unas consideraciones metodológicas que al simple lector le puede resulta un poco cuesta arriba. Sin embargo, desde esas primeras páginas, se pone de manifiesto la sabiduría de un maestro que sabe enfrentarse a los grandes temas históricos, teológicos y exegéticos y, además, llevar esos contenidos a la vida personal y al momento presente con consumada pedagogía. Su estilo es claro, integral y asequible.
Ya desde este inicio, el Papa comienza a sorprender por su serenidad y modestia y, a la vez, porque se distancia de los prejuicios intelectuales de moda. Así nos dice: «este libro no está escrito en contra de la exégesis moderna, sino con sumo agradecimiento por lo mucho que nos ha aportado y nos aporta». Deja claro que: «no es en modo alguno un acto magisterial, sino únicamente expresión de mi búsqueda personal «del rostro del Señor» (cf Sal 27,8). Por eso, cualquiera es libre de contradecirme. Pido sólo a los lectores y lectoras esa benevolencia inicial, sin la cual no hay comprensión posible». Dada la edad avanzada del escritor, él mismo confiesa «he decidido publicar esta primera parte», y si el «tiempo y las fuerzas» se lo permiten nos ofrecerá un segunda parte en la entrará los relatos de la infancia.
El método del autor está en ese intercambio recíproco de conocimientos históricos y conocimientos de la fe. Desde la introducción presenta el misterio de Jesús en sus raíces hebreas: «En Jesús se cumple la promesa del nuevo profeta. En Él se ha hecho plenamente realidad lo que Moisés era sólo imperfecto: Él vive ante rostro de Dios no sólo como amigo, sino como Hijo; vive en la más intima unidad con el Padre». Queda claro que no está hablando de un fundador más de una religión, sino de Alguien que «ha roto todos los moldes»: Jesús, Dios y Hombre verdadero, Salvador y Redentor de la humanidad. De este modo, dice el Papa, «el discípulo que camina con Jesús se verá implicado con Él en la comunión con Dios. Y esto es lo que realmente salva».
El «camino interior» de Benedicto XVI se va mostrando a lo largo de los diez capítulos en que se compone el libro: El bautismo de Jesús. El Evangelio del Reino de Dios. El Sermón de la Montaña. La Oración del Señor. Los discípulos. El mensaje de las parábolas. Las grandes imágenes del Evangelio de Juan. La confesión de Pedro y la transfiguración. Nombres con los que Jesús se designa a sí mismo. Concluye con una interesante bibliografía y un índice onomástico.
Estamos ante la obra más comentada durante los últimos meses, en el mundo cultural occidental tanto en los medios cristianos como agnósticos. Esperemos que en España, los medios culturales afines al pensamiento dominante, no silencie el acontecimiento de esta publicación, porque ello revelaría no sólo la banalidad y mediocridad intelectual que se percibe en muchos ambientes, sino también la animadversión que hacia la cultura católica se ha instalado en el poder. Pero, es mejor seguir confiando que todavía quedan en este país, hombres y mujeres que con altura de miras sabrán recibir este libro con la benevolencia que pide el Papa y que facilita la comprensión de toda obra humana.
+ Juan del Río Martín
Obispo de Jerez