CARACAS, jueves 10 de julio de 2008 (ZENIT.org).- «Ante el surgimiento de un nuevo grupo religioso denominado ‘Iglesia Católica Reformada’, reafirmamos que la Iglesia católica a la cual pertenece la gran mayoría del pueblo venezolano, no se ha dividido».
Así lo afirmó monseñor Ubaldo Santana Sequera, arzobispo de Maracaibo y presidente de la Conferencia Episcopal de Venezuela, durante la apertura de la 90 Asamblea Plenaria de este episcopado, que tiene lugar en Caracas desde el lunes 7 de julio.
Se refirió así al recién creado grupo religioso autodenominado «Iglesia Católica Reformada», afín al Gobierno, y entre cuyos miembros habría dos sacerdotes católicos, además de miembros de otras confesiones.
Monseñor Santana recordó que «la Iglesia católica, reunida y alimentada por la Palabra y por la Eucaristía, existe y se manifiesta solamente en las arquidiócesis, diócesis y vicariatos en comunión entre si con el Obispo de Roma».
«Desde esta Asamblea Episcopal, cercana aún la fecha de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, que es también la fiesta del Papa y de la condición petrina y apostólica de la Iglesia, manifestamos a Su Santidad el Papa Benedicto XVI, nuestra plena comunión eclesial y expresamos con gozo nuestra obediente adhesión a su persona y a su Ministerio».
El prelado pidió al resto de obispos que respondan «con firmeza, a todos aquellos que pretendan sembrar la confusión y la división en el rebaño católico».
«No es la primera vez que surgen en Venezuela grupos religiosos que buscan dividir a los católicos y separarlos de sus pastores. Gracias a Dios nunca lo han logrado», añadió.
Por otro lado, el presidente del episcopado venezolano manifestó su alegría por la liberación de Ingrid Betancourt y otros 14 rehenes. «Pedimos al Señor por nuestra hermana República para que este acontecimiento haga más cercana su definitiva pacificación».
Sin embargo, monseñor Santana manifestó también su preocupación «por el incontrolado clima de violencia y de inseguridad que invade el cuerpo social y político de Venezuela sin que se vean hasta ahora acciones concretas y contundentes para contrarrestarlo».
Además, señaló como inconstitucionales las «inhabilitaciones de carácter administrativo impuestas a un gran número de venezolanos», ya que medidas de este tipo «constituyen un elemento que enturbia el clima democrático de las próximas elecciones».
«Cuando los obispos hacemos estos señalamientos, no somos voceros de ninguna parcialidad política o social. Solo nos guía el bien de todos los venezolanos y venezolanas y el mejoramiento de la calidad de convivencia de todos los que comparten el alma, la vida y el corazón de esta patria, particularmente los más pobres y desasistidos», añadió.
«Vivimos un cambio de época de consecuencias insospechadas. No sabemos aún exactamente hacia donde se encaminan nuestros pueblos. Pero lo que si es importante es que nuestra gente sienta y sepa que cualquiera sea la ruta por donde vaya nunca la dejaremos sola, siempre caminaremos a su lado y que lo haremos no como activistas, ni como actores políticos, ni siquiera como meros agentes humanitarios sino en nombre de Jesucristo, como maestros de la fe, como santificadores y servidores de la caridad».
Pastoral sacerdotal y nueva evangelización
Los Obispos también tratarán sobre la pastoral sacerdotal con el fin de «analizar a fondo la situación actual del clero venezolano, definir el perfil del sacerdote que necesita la evangelización renovada y profunda de nuestro pueblo y delinear los criterios de organización que tenemos que darle a nuestros seminarios y centros de formación permanente para lograr contar a mediano plazo con el número suficiente de sacerdotes santos y cualificados».
Durante la asamblea los obispos dedicaran particular atención a la pastoral sacerdotal y a las exigencias de una nueva evangelización, con el fin de «analizar a fondo la situación actual del clero venezolano, definir el perfil del sacerdote que necesita la evangelización renovada y profunda de nuestro pueblo y delinear los criterios de organización que tenemos que darle a nuestros seminarios y centros de formación permanente para lograr contar a mediano plazo con el número suficiente de sacerdotes santos y cualificados».
Entre los actos previstos, se está celebrando una Asamblea Conjunta con la Confederación Venezolana de Religiosos y Religiosas durante dos días, en la que uno de los temas más importantes es la educación.
Está prevista la aprobación, también de un mensaje con motivo de los cuarenta años del Documento Conclusivo de Medellín (1968-2008), de una Carta Pastoral Colectiva sobre la Espiritualidad renovada que ha inspirar al pueblo cristiano en la edificación de una Iglesia casa, escuela y taller de comunión y solidaridad, asi como una Carta pastoral colectiva para lanzar el Plan Pastoral «Iglesia solidaria».
Más información: www.cev.org.ve
Por Inmaculada Álvarez
