CIUDAD DEL VATICANO, viernes, 13 de marzo de 2009 (ZENIT.org).- «Cambio tesoros del Vaticano por comida para África. ¿Te apuntas?». Con este mensaje un internauta ha abierto un espacio en Facebook. En pocos días, hasta este viernes por la mañana, habían adherido 32.146 miembros.
El cardenal Paul Josef Cordes, presidente del Consejo Pontificio «Cor Unum», aclara que, independientemente del aspecto provocador o ideológico de la propuesta, el Papa no podría aplicarla, pues se lo impide el derecho internacional.
El presidente del organismo de la Santa Sede responsable para la orientación y coordinación entre las organizaciones y las actividades caritativas promovidas por la Iglesia católica, ha explicado la situación a ZENIT en un encuentro mantenido con periodistas.
La iniciativa de Facebook ha sido lanzada por un joven español, Alberto Juesas Escudero, quien explica la propuesta con algunos argumentos. Algunos de ellos son: «Porque es una vergüenza ver las riquezas del Vaticano y después el telediario».
Otros de los argumentos aducidos son: «Porque no admiten sus errores jamás. Porque no predican con el ejemplo. Porque Jesús nació en un pesebre y vivía en pobreza».
La motivación concluye con expresiones ofensivas: «¡Qué vergüenza el Vaticano! ¡Qué vergüenza la religión católica».
En su respuesta a la pregunta de ZENIT, el cardenal Cordes explica que este tipo de propuestas las escucha desde hace 40 años, es más, reconoce, antes se repetían incluso más.
Explica que cuando Juan Pablo II le llamó a Roma para colaborar con él en la Curia Romana, «el clima era muy fuerte contra el Vaticano. Entonces, en aquella época, me informe y descubrí que la Iglesia no puede hacer lo que quiere con las obras de arte que están en el Vaticano».
En realidad, aclara, la Iglesia «tiene la tarea de conservar las obras de arte en nombre del Estado italiano. No las puede vender».
El purpurado no sólo cita la teoría, sino que sobre todo se refiere a la realidad. Explica que, cuando en los años sesenta un bienhechor alemán hizo un don para restaurar el Colegio Teutónico, que se encuentra dentro del Vaticano, la dirección de esa residencia, como gesto de agradecimiento, le regaló una estatua sencilla, que no tenía un valor comparable a otras que se encuentran en los Museos Vaticanos, que se encontraba dentro del colegio.
Esa persona tuvo muchísimos problemas con el Estado italiano, pues fue acusado de sustraer bienes que Italia debe custodiar, explicó el cardenal.
«En todas las naciones hay muchas medidas para la defensa de las obras de arte, porque el Estado debe mantenerlas», aclara, recordando que los bienes de la Santa Sede forman también parte de la historia cultural de Italia.
El cardenal recuerda, por otra parte, que sin la obra de la Iglesia católica, el sistema sanitario y educativo en algunas regiones de África.
«Presidentes africanos lo reconocen cuando vienen a encontrar al Papa», explica el cardenal Cordes.
Sin la Iglesia en África, una gran parte de los enfermos de sida quedaría abandonada, pues la Iglesia con su red de hospitales es la institución que acoge al mayor número de personas con este virus.
Según explica el cardenal Cordes, al atraer el interés de los medios de información del mundo en su próximo viaje a África (Camerún y Angola), del 17 al 23 de marzo, el Papa centrará la atención sobre las necesidades que vive África, impulsando al mismo tiempo medidas concretas de auténtica solidaridad y respeto.
Por Jesús Colina