OTTAWA, viernes 27 de marzo de 2009 (ZENIT.org).- El presidente de la Conferencia Episcopal de Canadá, monseñor James Weisgerber, arzobispo de Winnipeg, ha enviado una carta en nombre de todos los prelados canadienses en la que muestra su apoyo al Papa «en este momento de prueba», tras el levantamiento de la excomunión a los cuatro obispos ordenados por el arzobispo Marcel Lefebvre.
En una carta fechada el 19 de marzo, y que ha hecho pública la Conferencia canadiense, monseñor Weisberger agradece especialmente la misiva que el Papa envió sobre este tema a todos los obispos del mundo, al principio de la Cuaresma.
«Quiero hacer hincapié en que los obispos de Canadá han quedado muy impresionados por lo que usted ha compartido en esta carta, y quiero asegurarle, por parte de ellos, su total apoyo fraterno», afirma el arzobispo de Winnipeg.
Los prelados «aplauden» los «esfuerzos del Papa por tener la mano con misericordia y con un espíritu de reconciliación» a todos, «incluyendo a los miembros de la Fraternidad de San Pío X».
«Siguiendo su ejemplo, queremos luchar con humildad y valentía, para fortalecer a nuestros hermanos y hermanas en que la unidad y la comunión que el Señor llamó a sus fieles, incluso si no están plenamente preparados para responder a esta invitación, como se hizo evidente en el caso de la Fraternidad San Pío X».
En su carta, los obispos apoyan también la decisión de asignar a la Congregación para la Doctrina de la Fe «la responsabilidad de futuras conversaciones con la Hermandad y las investigaciones que les conciernen».
Por otro lado, agradecen especialmente al Papa «la claridad y la firmeza con la que ha hablado sobre el tema del Holocausto. Al igual que ustedes, los miembros de la Conferencia de Obispos Católicos de Canadá considera abominable todo intento de negar, minimizar u olvidar esta tragedia y este mal».