MILÁN, jueves 22 diciembre 2011 (ZENIT.org).- “Buscamos familias que acojan a otras familias. Se necesita una hospitalidad física y una hospitalidad del corazón”. Es la invitación difundida por monseñor Erminio De Scalzi, obispo auxiliar de la Archidiócesis de Milán y presidente de la Fundación Milano Familia 2012, con motivo del VII Encuentro Mundial de las Familias que se realizará en Milán del 29 de mayo al 3 de junio del 2012 y que será clausurado con la presencia de Benedicto XVI. En rueda de prensa, este 20 de diciembre, dijo que se necesitan cien mil familias para dar hospitalidad a las provenientes de otras partes de Italia y de todo el mundo.
La organización quiere garantizar a todos un espacio para hospedarse gratuitamente, de tal modo que se favorezca también a aquel que llega de los países más pobres. “Quien ofrezca hospedaje terminará por dejarse interpelar de los estilos de vida personales y familiares diferentes de los nuestros, así como para descubrir virtudes familiares como la simplicidad y la sobriedad, que hemos perdido en Europa. A esto, Monseñor De Scalzi ha añadido que “Milán es una ciudad con tantos habitantes sin casa y de tantas casas sin habitantes; me gustaría que el Encuentro mundial de las familias fuera una ocasión para abrir estas casas”.
“Nos hemos sumado al llamado de la hospitalidad”, subrayó el padre Virginio Colmegna, presidente de la fundación Casa de la Caridad, –desde donde se hizo el llamado–, “porque nosotros vivimos de la hospitalidad”. “Daremos nuestra contribución”, explica el padre Colmegna, “hospedando en esos días a una familia proveniente del extranjero. Es la cultura de la hospitalidad la que origina familia. La categoría de la hospitalidad no es una actividad asistencial: es un trabajo de carácter formativo”. Hemos abierto la Casa de la Caridad para las parroquias del distrito, para sensibilizar a las familias de la zona a que ofrezcan hospitalidad, y ya se han conseguido algunas adhesiones. Los organizadores invitan a todas las parroquias y organizaciones de nuestro territorio a hacer lo mismo.
“También el Ayuntamiento de Milánse está preparando a acoger a los participantes del VII Encuentro Mundial de las Familias”, explicó la teniente de alcalde María Grazia Guida. “La administración, desde los primeros días del acuerdo, se ha puesto al servicio de la Fundación Milano Familia 2012 y del Prefecto, quien es el comisario extraordinario para el evento, a fin de que la compleja máquina organizativa esté en disposición de acoger al mayor número de personas posible. Ahora lanzamos el llamado a la ciudad para que se abran a las familias que llegarán”. Entre las iniciativas anunciadas por la segunda edil están la participación de la empresa Milano Ristorazione,para la preparación de las comidas, en especial para los niños, así como la disposición de las estructuras de los jardines de infancia para la animación y la acogida; también se contará con la presencia de tutores, quienes podrán asistir a los ancianos que están solos y que pongan a disposición sus casas.
El plazo máximo para que las familias milanesas ofrezcan su disponibilidad a la acogida se ha fijado en el 31 de marzo, ha explicado el padre Luca Violoni, secretario general de la Fundación Milano Familia 2012. Se puede ofrecer la propia hospitalidad escribiendo a la dirección accoglienza@family2012.com.
En enero se han programado ocho fechas en diversas ciudades de la Archidiócesis de Milán, para sensibilizar y animar a la hospitalidad y clarificar mejor las modalidades de participación en esta cumbre mundial de las familias católicas a la que asistirá Benedicto XVI.
Texto facilitado por el departamento de medios del Encuentro Mundial, traducido del italiano por José Antonio Varela Vidal