SAN CRISTÓBAL, martes 14 febrero 2012 (ZENIT.org).- Con una multitudinaria concentración de jóvenes la diócesis de San Cristóbal celebró este sábado el “Encuentro de Jóvenes con el Obispo” en la población de Umuquena. Casi tres mil jóvenes provenientes de las diversas parroquias del Táchira asistieron deseosos de reafirmar a Cristo como la alegría de su vida.
En una fiesta de colores, cantos, bailes, y oraciones la Juventud Católica del Táchira, se encontró con el obispo diocesano quien respondió a las interrogantes de los jóvenes. Quienes se cuestionaron sobre el mundo cambiante, el relativismo, la fe, la evangelización, la vocación cristiana, y el noviazgo.
El obispo diocesano, monseñor Mario Moronta, envió un mensaje a quienes en Venezuela celebran el día de la juventud, invitándolos a seguir dando la vida, según el amor de Dios, por la patria. “Cristo es la razón de ser de nuestra existencia, y en el día de la juventud les pido a los jóvenes que en nombre de la caridad de Cristo sigan dando su vida por Venezuela”, dijo el prelado.
Y en un compartir cercano, algunos jóvenes fueron interviniendo para preguntar al Obispo, quien respondió como Padre y Pastor. En cuando al mundo cambiando, el Obispo respondió: “No dejen de ser jóvenes, sean siempre animados. Mantengan en alto la mente con los principios, de manera especial el Temor de Dios, y demostremos a la sociedad que los jóvenes son los que pueden construir el futuro en el mundo cambiante y relativista”. Pues insistió que “el camino que lleva a la perdición es el relativismo, recordemos lo que dice el evangelio, tomemos la cruz, que es la que nos da la esperanza para triunfar”.
Luego, monseñor Moronta recordó a los jóvenes que la mejor manera de mantenerse firmes en la fe es “poniendo nuestra mente y nuestro corazón en Cristo, para vencer tantas cosas negativas. Les recomiendo que se organicen en las parroquias y otras instituciones para edificar un mundo de justicia y paz”. E invitó a seguir siendo “evangelizadores de los otros jóvenes, sean misioneros en aquellos lugares donde no llega aun el anuncio del evangelio”.
De igual manera les exhortó a tener a Cristo como la única opción de vida, para no ir por otros caminos. “Hay una juventud que va por los caminos de la oscuridad, pero hay más jóvenes con la luz de Dios que son quienes deber dar testimonio de vida cristiana para atraer a los demás hacia Dios, que es la opción de vida”.
A quienes sienten el llamado vocacional, les dijo que “la mejor manera de ir descubriendo la vocación a la que Dios nos llama es a través de la oración, y uniéndonos a las tareas apostólicas de nuestras parroquias o instituciones”.
Finalmente, invitó a los jóvenes que viven el noviazgo a ver la imagen de Jesucristo. “Jesús está casado con la humanidad y permanece fiel, y antes la cortejó con sus milagros y su predicación. Y luego constituyó un hogar que se llama la Iglesia, esta es una imagen que nos puede ayudar. Y además con el diálogo y la oración, podrán vivir un buen noviazgo. Valorándose ambos, amándose para poder luego en el matrimonio manifestar ese amor con fidelidad”.
El Encuentro de Jóvenes con el obispo fue amenizado musicalmente por “Cantores del Corazón”. También la Asociación Venezolana de Educación Católica hizo una presentación de lo que será la Jornada Mundial de la Juventud Río 2013. Y el presbítero Gustavo Roa dirigió un momento de adoración al Santísimo, con el cual fue bendecida toda la juventud.
La próxima Jornada Diocesana de Jóvenes que tendrá como lema “Una juventud con Cristo para una Iglesia siempre joven”, se realizara en la catedral de San Cristóbal el 9 de febrero de 2013, en el marco del Año Jubilar de los 90 Años de la Iglesia del Táchira.