PAMPLONA, miércoles 29 febrero 2012 (ZENIT.org).- El decano de la Facultad de Teología de la Universidad de Navarra y profesor de Nuevo Testamento de la Universidad de Navarra, Juan Chapa, ha descubierto en Inglaterra un nuevo evangelio apócrifo, texto que por su contenido o forma se parece a los cuatro evangelios incluidos en el Nuevo Testamento: Mateo, Marcos, Lucas y Juan.

El fragmento, pertenece a la colección de papiros de Oxirrinco, Egipto, que se conserva y edita en la Universidad de Oxford, bajo el patrocinio de la Egypt Exploration Society de Londres y la British Academy.

El texto, recién descubierto y publicado, mide siete centímetros de largo por siete de ancho y está escrito por ambos lados con restos de veintidós líneas. En una cara, el documento recoge unas palabras de Jesús dirigidas a sus discípulos que, según explicó Chapa, son "una llamada al seguimiento radical, con una alusión a Jerusalén y al Reino". En la otra cara, se relata parte de un "exorcismo" realizado por Jesús que, según indica Chapa, no encuentra su paralelo exacto en los cuatro evangelios canónicos y que, más que un nuevo exorcismo, parece una síntesis de los ya conocidos por los otros evangelios y "atestigua la importancia que tuvo entre los primeros cristianos esta actividad de Jesús".

Según este especialista en papiros, que colabora desde hace años con el proyecto de edición de papiros de la colección británica, aún se desconoce el alcance del hallazgo, pero ha asegurado que "ofrecerá luces nuevas para conocer mejor el cristianismo de los dos primeros siglos y lo que leían y pensaban los primeros cristianos de Egipto, así como sobre la formación de los evangelios". "Destaca especialmente por su antigüedad --señala Chapa--, pues fue escrito en torno al año 200. Se conservan muy pocos manuscritos de esa época, y menos aún testimonios de los evangelios apócrifos".

En ese sentido, apuntó que, de los dos primeros siglos, se posee "poco más de una decena de manuscritos" de los cuatro evangelios canónicos y únicamente cuatro de evangelios apócrifos: del evangelio de Tomás, del llamado Egerton Gospel --un evangelio desconocido que sólo se conoce por este manuscrito--, y de otros dos que algunos atribuyen al evangelio de Pedro.

Los cuatro evangelios incluidos en el Nuevo Testamento son los que la Iglesia ha transmitido como testimonio auténtico procedente de época apostólica y el resto de libros del mismo género se perdieron por no añadir nada nuevo a lo que contenían aquellos cuatro, o porque se elaboraron a partir de ellos, con el fin de difundir alguna doctrina particular, en ocasiones en disconformidad con la que se encuentra en los evangelios canónicos.