Un grupo de caballeros de la Hermandad de Bratian, con sede en el norte de Polonia, viajará a caballo hasta Roma con el fin de participar en la ceremonia de canonización de los beatos Juan Pablo II y Juan XXIII. Los jinetes lucirán vestiduras tradicionales de épocas pasadas, que incluyen la armadura de los caballeros medievales, así como los uniformes de húsares y ulanos.
La comitiva conformada por nueve jinetes y sus caballos, además de un equipo técnico de seis personas que cuentan con remolques especiales para los animales, partirá el 19 de abril y deberá cubrir una distancia de unos 300 kilómetros diarios para llegar el día 25 o 26 a la Ciudad Eterna. Los caballeros planean salir de Bratian y emprender una ruta que pasará por Czestochowa, Bratislava, Treviso, Rávena, Asís y finalmente Roma.
El viaje que llevarán a cabo se asemeja al realizado por dos gobernantes prusianos hace 800 años, quienes aceptaron el consejo del obispo cisterciense que los bautizó y acudieron ante Inocencio II para certificar la adopción del cristianismo por parte de sus pueblos. El Pontífice los recibió en audiencia y emitió la bula papal «Terra Lubavia» en 1216 para registrar este hecho.