Ante la inminente visita del papa Francisco a Ecuador, Bolivia y Paraguay, se van conociendo algunas anécdotas de cuando el padre Jorge Marío Bergoglio viajó a esos países de Latinoamérica y se entiende mejor el profundo conocimiento que el Pontífice tiene de esos países.
Cuando el ahora Pontífice fue por primera vez a Ecuador en 1980, visitó los seis colegios jesuitas de Portoviejo, Cuenca, Quito, Riobamba y Guayaquil. El que más le gustó fue el colegio Javier. El sacerdote Francisco Cortés, mejor conocido como el padre ‘Paquito’, fue por varios años el guía espiritual de ese centro, ubicado en el norte de Guayaquil. Hoy ese religioso español de Málaga tiene 90 años, y hace 53 años llegó a Ecuador para ayudar en la formación de los jóvenes jesuitas.
Entre otros particulares, el embajador de Ecuador ante la Santa Sede,, Luis Latorre que el Papa le confió que lleva en sus documentos una imagen de la Dolorosa, ‘a quien le rezo todos los días’, devoción muy sentida en Ecuador. Y le recordó su amistad con ‘el padre Villalba’ y ‘el padre Paquito’, con quien también almorzará en su viaje.
En los años ochenta, el padre ‘Paquito’ fue uno de los que recibió a Jorge Mario Bergoglio, quien en aquel entonces era el superior provincial de los Jesuitas en Argentina y buscaba un lugar en el que los religiosos de la Compañía en formación pudieran capacitarse. Ambos establecieron una amistad que todavía permanece viva.
Por otra parte, la Agencia de Noticias Fides (ANF) ha revelado que el actual Papa estuvo en Bolivia, en la ciudad de Cochabamba, en dos ocasiones: en 1974 y en 1979. Dos fotografías, propiedad de la Compañía de Jesús, atestiguan la presencia del padre Bergoglio en esa localidad.
En 1974, tuvo lugar la Reunión de Provinciales Jesuitas del Cono Sur. La sede del encuentro fue la Casa Nuestra Señora de la Esperanza en Cochabamba. El actual Papa, que en aquel entonces tenía 38 años y fungía como cabeza de los jesuitas argentinos, participó en esa reunión que sirvió para preparar la 32 Congregación General de la Compañía de Jesús.
En 1979, el padre Bergoglio regresó a Cochabamba para asistir a la Reunión de Directores Diocesanos de las Obras Misionales Pontificias que se celebró en la Casa Nazaria Ignacia de la zona de Cala Cala, lugar donde las Hermanas Cruzadas de la Iglesia tienen un espacio para retiros y otros encuentros.
Hoy las religiosas cuentan con una imagen en la que se puede apreciar a un joven Francisco durante su visita a esta casa cuando aún no era el sucesor de Pedro. La fotografía ampliada está ubicada en el comedor de las hermanas, y fue obsequiada un tiempo atrás por el padre Antonio Menacho.
El próximo 10 de julio tampoco será la primera visita del Santo Padre a Paraguay, al que Umberto Eco llama “un jesuita paraguayo”. En estos días varios medios de comunicación locales comenzaron a investigar sobre anteriores estancias del Pontífice de origen argentino, y así llegaron hasta los archivos de la Policía Política de los tiempos de la dictadura de Alfredo Stroessner, quien gobernó el país desde el 15 de agosto de 1954 hasta el 3 de febrero de 1989, ha relatado Tierras de América.
En este sentido, la primera vez que el papa Francisco estuvo en Paraguay, llegó a la capital, Asunción, con un vuelo de Aerolíneas Argentinas. Fue el 18 de julio de 1977 con motivo de una reunión de provinciales jesuitas. La información fue confirmada por el padre Mario García, quien todavía recuerda aquel episodio.
En los archivos del Museo de Justicia se localizó también la documentación de otra visita del entonces superior provincial de Argentina fechada el 6 de agosto de 1980. El padre José Luis Caravias corroboró que en esa oportunidad el entonces sacerdote jesuita acudió para una reunión de maestros de novicios.