El arzobispo de Cochabamba y presidente de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), monseñor Óscar Aparicio, afirmó que el papa Francisco visitará Bolivia los días 8, 9 y 10 de julio, para “tener buena relación con el Estado, con el Presidente”.
“El Papa tuvo una elección muy clara: tener buena relación con el Estado, con el Presidente. No se trata sólo de una diplomacia entre dos jefes de Estado que se visitan. Hay una intención muy particular de abrir la puerta del diálogo, de la colaboración, del mutuo respeto”, señaló Mons. Aparicio en una entrevista concedida a Infodecom.
El presidente de la CEB dijo también que en el pasado “se nos ha querido hacer ver como la oposición, la Iglesia en Bolivia está para coadyuvar y ayudar, y el signo del Papa es un signo muy claro de acercamiento”.
Por este motivo, subrayó que “esto no puede pasar desapercibido, sino que es un signo y un gesto muy evidentes de hacer lo que la Iglesia ha hecho siempre: ponerse al servicio, en predisposición, en diálogo y en un acercamiento de colaboración”.
El Santo Padre sostendrá una primera reunión con el presidente Evo Morales este miércoles por la tarde en el Palacio de Gobierno. Luego en Santa Cruz, el Pontífice se reunirá con organizaciones sociales y también con el clero boliviano, además de realizar una visita a los internos de la cárcel de Palmasola.
Así, el arzobispo de Cochabamba aseguró que “hay signos de acercamiento” con el Gobierno desde que se anunció la visita de Francisco. “Estamos hablando –reconoció– de tres meses donde hubo acercamiento y también con sus dificultades”.
En esta línea, Mons. Aparicio recordó que “hubo un período de varios años entre ‘golpes y golpes’. Pero hoy se ha dado mayor diálogo, mayor acercamiento. Esperemos que eso perdure”.
Con respecto a ese proceso de acercamiento con el Gobierno, el presidente del episcopado boliviano explicó que “se ha propuesto que podamos tener una agenda de temas de tipo social, es decir de la labor que nosotros, como Iglesia, hacemos en los hogares, educación, salud, etc.”. “La intención es llevar adelante esta agenda para atender estos temas. Hemos dado pasos adelante e incluso hemos nominado personas que podrían ser los protagonistas de ese diálogo y acercamiento”, apuntó.
Monseñor Óscar Aparicio concluyó sus declaraciones aclarando que “la Iglesia está para ayudar y colaborar porque no somos oposición. Ojalá que sea un momento histórico”.