La cumbre de alcaldes del mundo convocada por el Vaticano inicia este martes en el Aula del sínodo, con el título “Esclavitud moderna y cambio climático: el compromiso de las ciudades”. El miércoles en cambio prosigue en la Casina Pío IV, siempre en el Vaticano, con el tema: “Prosperidad, gente y planeta: Consecución de un desarrollo sostenible en nuestras ciudades”.
Por la tarde del primer día, el papa Francisco dirigirá sus palabras a los participantes de la cumbre convocada por la Pontificia Academia de las Ciencias y de las Ciencias Sociales, y las Naciones Unidas.
El evento busca luchar contra la trata de personas, un fenómeno que produce más de 30 millones víctimas, traficadas en un mercado abominable con ganancias ilegales que se estiman en 150 mil millones de dólares al año y facilitar medidas que se contrapongan al cambio climático.
El principal objetivo es lograr que los alcaldes y los funcionarios municipales se unan a los líderes religiosos en su petición para que la ONU considere la esclavitud moderna y la trata de personas como un delito de lesa humanidad, así como ejercer presión moral sobre esa organización para asegurar que los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible, que serán aprobados por la ONU en septiembre de 2015 y en la XXI Conferencia de las Partes de París (COP21) en diciembre, asignen un peso suficiente a estas dos urgencias dramáticas. La contribución activa de los gobiernos locales es crucial en la lucha contra este delito atroz, indica el Vaticano.
El 2 de diciembre de 2014, el Papa Francisco y otros líderes cristianos, musulmanes, hindúes, budistas y judíos suscribieron la Declaración conjunta de los líderes religiosos contra las formas modernas de la esclavitud. Esta fue una expresión pública de su compromiso para trabajar juntos en llevar adelante acciones, tanto espirituales como prácticas, con el fin de erradicar este crimen contra la humanidad, devolviendo la dignidad y la libertad a las víctimas.
Más adelante, el 28 de abril de 2015, durante otro encuentro que se celebró en la Casina Pío IV y que se llamó «Proteger la tierra, dignificar a la humanidad», las Academias Pontificias, junto con las Naciones Unidas y los líderes religiosos, se comprometieron a enfrentar esas dos urgencias globales.
En el encuentro que se celebra esta semana, estarán presentes más de 60 alcaldes, muchos de grandes ciudades europeas y estadounidenses, como Nueva York, California, Nueva Orleans, San Francisco, Vancouver, Bostón, Escolmo, Bristol, Roma, París y la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, conocida por sus posiciones fuertemente laicistas.
Entre los alcaldes y representantes de latinoamérica estarán; Mónica Fein (Rosario, Argentina); José Fortunati (Porto Alegre, Brasil); Gustavo Fruet (Curitiba, Brasil); Eduardo Accastello (Villa María, Argentina); Carlos Villalonga (Buenos Aires; Paulo Garcia (Goiânia, Brasil); Fernando Haddad (Sao Paulo, Brasil); Antônio Carlos Magalhães Neto (Salvador, Brasil); Eduardo Paes (Rio de Janeiro, Brasil, presidente del C40); Gustavo Petro (Bogotá, Colombia); Karen Paulina Rojo Venegas (Antofagasta, Chile); Isidro Noel Ruiz Martinez (Santa Fe, Honduras) y Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano (Coordinador internacional de Ciudad del México).
El evento podrá seguirse en redes sociales con el hashtag #mayorscare y en el canal de youtube del Vaticano.
