(ZENIT – Ciudad del Vaticano).- La Santa Sede y la sociedad PricewaterhouseCoopers (PwC) han retomado el acuerdo que habían suspendido para continuar colaborando juntos. Lo ha anunciado hoy el padre Federico Lombardi, director de la oficina de prensa de la Santa Sede, indicando que la relación con la auditoría es un conjunto de servicios, no solamente un control de los balances. El acuerdo incluye también servicios de formación, asesoramiento y consulta.
El pasado 26 de abril, el Vaticano suspendió el contrato con la auditoría financiera, a la vez que aclaraba que la decisión no tenía nada que ver con un intento de bloquear las reformas en curso. De este modo, se explicó que la medida se adoptaba porque en el curso de su trabajo, “han surgido elementos que afectan al significado y al alcance de algunas cláusulas del contrato y su modalidad de ejecución”. Por ello, se indicaba que “dichos elementos serán sometidos a las necesarias profundizaciones”.
Ahora indican que tales elementos han sido sometidos a las necesarias profundizaciones “en una atmósfera de serena colaboración”, resolviendo las cuestiones que habían surgido. En particular –ha explicado el padre Lombardi– se ha reconocido que por ley la tarea de la revisión contable es encomendada a la Oficina del Revisor General (URG por sus siglas en italiano), como sucede por regla en cualquier estado soberano.
Dado que en conformidad a la normativa vigente esta responsabilidad institucional es competencia del URG, PwC “desarrollará un rol de asistencia y estará a disposición de los dicasterios que quieren servirse de su ayuda o asesoramiento”.
Por otro lado, el portavoz vaticano ha indicado que el camino hacia una correcta y apropiada implementación de los International Public Sector Accounting Standards (IPSAS) es normalmente complejo y largo. Para ello se requiere una serie de elecciones legislativas y la adopción de procedimiento contable-administrativo, actualmente en vía de elaboración.
Asimismo se ha anunciado que la Santa Sede, “teniendo en cuenta el aprecio por la actividad ya realizada por PwC”, han suscrito un nuevo acuerdo que, en coherencia con el cuadro institucional, prevé “una colaboración más amplia” de la auditoría y susceptible de ser adaptada a las exigencias de la Santa Sede.
Finalmente, el comunicado publicado hoy indica que con este acuerdo se pretende “consentir a todos los entes de la Santa Sede participar más activamente en el recorrido de las reformas”. Con esta iniciativa la Santa Sede se servirá también en el futuro próximo de la colaboración de PwC. “El compromiso para una revisión económica-financiera de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano ha sido, y permanece prioritario”, asegura el padre Lombardi.
La Santa Sede anunció el pasado 5 de diciembre que había encargado a esta auditoría internacional actuar como revisor externo en sus cuentas financieras y trabajar en estrecha colaboración con la Secretaría para la Economía del Vaticano.
“El Consejo de Economía, continuando con la implementación de nuevos criterios y prácticas de gestión financiera en línea con las normas internacionales, ha dado un nuevo paso importante durante esta semana, otorgando un nuevo encargo a una empresa auditora, que se encuentra entre las más importantes a nivel internacional”, explicó la Santa Sede en ese momento.
El papa Francisco creó el Consejo de Economía el 24 de febrero de 2014 para “evaluar las directivas y gestiones concretas y analizar los informes sobre las actividades económico-administrativas de la Santa Sede”. El Consejo está formado por 15 miembros, de los cuales ocho son cardenales u obispos.
La Santa Sede retoma el acuerdo con la auditoría PwC
La relación se había suspendido para profundizar elementos que afectaban al significado y al alcance de algunas cláusulas del contrato y su modalidad de ejecución