(ZENIT – Roma).- La Conferencia Episcopal de Honduras después de concluir la reunión ordinaria en Tegucigalpa ha expresado su preocupación por “el dolor” que viven muchos hondureños, especialmente los niños, “obligados a emigrar, vulnerables a la explotación y a la violencia durante su camino, mal pagados cuando llegan a su destino, y criminalizados por la arrogancia de aquellos que se aprovechan de su sudor”.
Por ello ha pedido a los políticos que se acerquen a la realidad del pueblo hondureño y den propuestas válidas para frenar la desigualdad, la exclusión y la corrupción en el país. Teniendo en cuenta también que el 2017 será un año con elecciones primarias en marzo y generales en noviembre.
Señalan que los candidatos para gobernar “deben estar cerca de la realidad de nuestro pueblo para analizar, proponer y ofrecer alternativas para superar la desigualdad y la exclusión, y deshacerse de la corrupción”.
Por su parte los obispos se han comprometido en “fortalecer” la Pastoral de la Movilidad Humana, para que los niños y adolescentes que emigran “vulnerables y sin voz”, reciban “el amor y la cercanía de toda la comunidad”.
Las cifras oficiales han hablan de 10.468 los menores de edad no acompañados hondureños que han logrado cruzar la frontera entre México y los Estados Unidos en 2016. Una cifra superior del 93,5 por ciento más que los 5.409 llegados a ese país en 2015.
Los obispos desean por lo tanto un Feliz Año a sus compatriotas, pidiendo que sean responsables del bien común, ”de informar sobre las propuestas y proyectos, de controlar lo que se promete y de no dejarse llevar por ofertas engañosas o por palabras que puede parecer mágicas».
Niños migrantes juegan en Tijuana, en un centro de los salesianos, mientras esperan los documentos (Foto Ans)
Honduras: los obispos lamentan el calvario de los emigrantes menores de edad
En 2016 más de diez mil menores de edad no acompañados hondureños han logrado cruzar la frontera entre México y los Estados Unidos