(ZENIT – Roma, 24 de septiembre de 2017). – “Dios no excluye a nadie y quiere que cada uno alcance su plenitud”, explica el Papa Francisco que ha comentado la parábola de los obreros de la onceava hora antes del ángelus de este domingo 24 de septiembre de 2017, desde la ventana del despacho del palacio apostólico del vaticano que da a la plaza San Pedro.
“Con esta parábola, Jesús quiere abrir nuestros corazones a la lógica del amor del Padre, que es gratuito y generoso”, ha explicado el Papa.
Ha insistido sobre la “mirada”: “Jesús quiere hacernos contemplar la mirada de este maestro (…), lleno de atención, de benevolencia, (…) que llama, que invita a levantarse, a ponerse en camino, porque él quiere la vida para cada uno de nosotros, quiere una vida plena, comprometida, salvado de una vida de vacío y de inercia”.
El Papa ha hecho hincapié en esta lógica de “misericordia”: “Usa la misericordia, no para olvidar esto, usa la misericordia, perdona ampliamente, está lleno de generosidad y de bondad que él reparte sobre cada uno”.
Él ha añadido: “Dios que no excluye a nadie y quiere que cada uno alcance su plenitud. Este es el amor de nuestro Dios, de nuestro Dios que es Padre”.
Una mirada que cambia la mirada: el Papa ha invitado a invocar a María para poder “acoger (….) la lógica del amor que nos libera de la presunción de merecer la recompensa de Dios y del juicio negativo sobre los demás”.
Nuestra traducción, del italiano, de las palabras pronunciadas por el Papa francisco antes de la oración del ángelus dominical se encuentra aquí.
Angelus 24/09/2017 CTV
Ángelus: “Dios no excluye a nadie y quiere que cada uno alcance su plenitud”
“La lógica del amor del Padre”