(ZENIT – 29 Nov. 2017).- Una multitud estimada en cientos de miles se unió al Papa Francisco para su primera Misa pública en Myanmar, una nación con el 90% de la población budista y que cuenta con la cifra de 659.000 católicos. La misa se celebró temprano el 29 de noviembre de 2017 en el llano de Kyaikkasan.
El tercer día del Papa Francisco en Myanmar va a estar dedicado especialmente a la comunidad católica, con la celebración de la Santa Misa a primera hora del día (8:30 h.) y con el encuentro con los obispos del país por la tarde (17:15 h). También, el Santo Padre se reunirá con el Consejo Supremo «Sangha» de monjes budistas en el Centro «Kaba Aye» (16:15 h).
El Papa Francisco ha llevado un báculo de madera realizado de forma artesanal y donado por los refugiados católicos de la minoría étnica Kachin.
Según ‘Asia News’ han llegado a Myanmar personas de otros países cercanos, como Tailandia o Filipinas, para participar en la visita apostólica del Papa Francisco, su 21º viaje apostólico internacional.
Han acompañado la celebración un coro formado por religiosas y jóvenes birmanos, ha realizado la primera lectura una mujer con velo blanco, típico para asistir a Misa en esta zona de Asia, y la segunda lectura una religiosa, con hábito blanco y azul.
En el ofertorio han participado jóvenes de Myanmar vestidos con los trajes típicos del país, de vivos colores y alegres atuendos en la cabeza.
Cientos de miles de personas han participado en la Misa. Captura de pantalla CTV
Multitudinaria Misa del Papa Francisco en el campo de Kyaikkasan
Primera Eucaristía pública celebrada en Myanmar