(ZENIT – 11 dic. 2018).- A 41 días del comienzo de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Panamá, el Arzobispo de Panamá Mons. José Domingo Ulloa Mendieta y una delegación panameña han presentado los últimos datos oficiales de la JMJ, que se celebrará del 22 al 27 de enero de 2109 en Panamá.
«Como país y como Iglesia, estamos preparados para recibir a los miles de peregrinos» ha asegurado el prelado panameño. En la primera fase, hay 258.000 jóvenes pre-inscritos (unos 200.000 procedentes de otros países y el resto de Panamá), ha explicado el presidente de la Jornada Mundial de la Juventud 2019 (JMJ).
47.000 jóvenes, de los 5 continentes –provenientes de más de 155 países– ya están inscritos oficialmente para participar en la JMJ de Panamá. En la fase segunda, cuentan con 168.000 jóvenes a punto de concluir su inscripción para ser partícipes de este evento.
Barco-escuela de Polonia
En esta 34ª Jornada Mundial de la Juventud colaborarán más de 37.000 voluntarios, la mayoría de Panamá, muchos de Colombia, y otros tantos de Brasil, Polonia, Francia, Honduras, Costa Rica, Ecuador, México y Estados Unidos.
Como anécdota, Mons. Ulloa ha anunciado que muchos jóvenes de Polonia llegarán a Panamá en un barco-escuela.
1.700 periodistas
Asimismo, los organizadores de la JMJ han ofrecido la cifra de que trabajarán más de 1.700 periodistas en el evento, y 400 obispos de otros países.
La presentación ha tenido lugar esta mañana, martes, 11 de diciembre de 2018, en un café de trabajo, celebrado en el hotel NH Centro de Roma, organizado por el periodista Manuel Fandila Sánchez, responsable de la Oficina de Información del Opus Dei en Italia.
Acompañando a Mons. José Domingo Ulloa en la mesa de presentación, han estado presentes Ana María León, Embajadora de Panamá en Italia; Miroslava Rosas, Embajadora de Panamá ante la Santa Sede; Danubia Allard, del Ministerio de Relaciones Exteriores en Panamá y la Jornada; Giancarlos Candanedo, director de comunicación de la Jornada Mundial de la Juventud (Gobierno de Panamá); y el Padre Rómulo Aguilar, Coordinador de las Jornadas Mundiales de la Juventud.
Del mismo modo, ha participado en la presentación Ricardo Achurra, encargado de protocolo de la Arquidiócesis de Panamá y de la Jornada Mundial de la Juventud 2019.
¿Por qué Panamá?
«¿Por qué una Jornada Mundial en la región centroamericana y por qué Panamá?» ha planteado D. José Domingo Ulloa a los periodistas y medios de comunicación presentes en la reunión.
El Papa Francisco nos ha dicho que «precisamente para ilusionar a los miles de jóvenes que viven esa cruda realidad centroamericana y del área, jóvenes que se ven forzados a emigrar, jóvenes que muchas veces caen en manos del narcotráfico y de tantas realidad que vive nuestra juventud, pero jóvenes que también están ilusionados y que lo que están esperando es oportunidades».
«Gran cantidad de estos jóvenes centroamericanos están ya preparados y están inscritos para venir a Panamá», ha relatado el pastor panameño. «Y entre esos jóvenes yo quisiera destacar una cifra que para nosotros es maravilloso: Más de 451 jóvenes van a estar participando en esta JMJ».
Presupuesto
«Mucho más de 54 millones de dólares» es el presupuesto con el que cuentan los organizadores para llevar a cabo la Jornada Mundial de Panamá, en enero de 2019.
¿Cómo se financia? Mons. Ulloa Mendienta ha aclarado que esta cifra ha sido obtenida a través de las inscripciones y los sponsor. El gobierno también aporta en «infraestructuras, seguridad y logística», ha añadido.
«Con mucho esfuerzo estamos todavía tocando los corazones» de algunas personas, sobre todo para que puedan participar en la JMJ el mayor número de jóvenes posible, ha indicado el presidente de la Jornada Mundial. «No queremos que ningún joven se quede sin participar de este evento», ha señalado.
Baile sorpresa
Al final del evento, han entrado en el salón 3 parejas de panameños vestidos con unos bellos trajes típicos, las mujeres de blanco con bordados de colores y cintas coloridas recogiendo su cabello, y los hombres con pantalón y camisa blanca, y sombrero en la cabeza.
Con sonrisas de ilusión, han bailado algunas canciones populares del folclore centroamericano y finalmente han sacado a bailar a algunos periodistas a la pista.