(ZENIT – 15 julio 2019).- El pasado sábado, 13 de julio de 2019, falleció el cardenal Paolo Sardi, de la Diaconía de Santa María Auxiliadora en la Vía Tuscolana.
Su muerte se produjo a los 84 años, después de una breve enfermedad, en el hospital Gemelli de Roma.
Al conocer la noticia de su fallecimiento, el Papa Francisco envió un telegrama a Pietro Angelo Sardi en el que el Pontífice transmitió sus condolencias a él, a su esposa y a la comunidad diocesana de Acqui.
El Papa agradeció el “testimonio edificante” del cardenal, que puso la mayor parte de su vida al servicio de la Santa Sede: “Su espíritu sacerdotal, su preparación teológica, sus dotes de ingenio y sabiduría aplicadas al trabajo asiduo y discreto”, constituyen una valiosa aportación “al magisterio de san Pablo VI, Juan Pablo I, san Juan Pablo II y Benedicto XVI”.
Igualmente, el Santo Padre une su oración “a la de los numerosos fieles que diariamente se acercaban al altar de la basílica vaticana donde celebraba la Misa».
“Fiel a su lema episcopal, ‘Esto Vigilans’”, prosiguió el Papa, “fue un siervo bueno y vigilante”.
Exequias
Hoy, lunes 15 de julio, a las 10:30 horas, en la basílica de San Pedro, ha tenido lugar el funeral del cardenal Paolo Sardi, celebrado por el cardenal Tarsicio Bertone, junto con los cardenales, obispos y arzobispos.
Durante la homilía, según informa Vatican News, el cardenal Bertone ha indicado: “La muerte tan repentina del cardenal Paolo Sardi nos afecta íntima y profundamente y se convierte en motivo de meditación y examen de conciencia sobre el sentido de la vida, sobre la grandeza y la fragilidad de nuestra vida: la grandeza de la vocación de ministerio, del sacramento de la caridad de Cristo Pastor; fragilidad porque cuelga de un hilo de tiempo y un fragmento de materia que es nuestro maravilloso cuerpo”.
Igualmente, ha destacado que Mons. Paolo Sardi ha sido «maestro de la teología moral», contribuyendo “a la formulación y difusión de la enseñanza moral del papa san Juan Pablo II”.
Entre los documentos de dicho pontificado, el purpurado ha hablado sobre la encíclica Veritatis Splendor que el cardenal Sardi “ilustró y explicó en sus numerosas comunicaciones a los fieles, demostrando que los términos ‘Verdad’, ‘Libertad’, ‘Conciencia’ y ‘Ley’ se entienden completamente solo dentro del horizonte cristiano apropiado, es decir, cuando la Verdad se convierte en Rostro en Cristo, la Libertad es concebida como un don de Dios, la Conciencia se convierte en la del Hijo ante el Padre y la Ley es considerada expresión del nuevo mandamiento del amor”.
Al final de la Eucaristía, el Santo Padre ha presidido el rito de la Ultima Commendatio y de la Valedictio.
Cardenal Paolo Sardi
El cardenal Paolo Sardi nació el 1 de septiembre de 1934 en Ricaldone, Piamonte (Italia) y fue ordenado sacerdote el 29 de junio de 1958.
Se licenció en teología y en derecho canónico por la Pontificia Universidad Gregoriana. También fue licenciado en derecho por la Universidad Católica del Sagrado Corazón de Milán.
Enseñó teología moral en Turín hasta 1976, cuando fue llamado a Roma para trabajar en la Secretaría de Estado en la primera sección de asuntos generales, coordinando la oficina que edita los textos y los discursos del Papa.
En 1996 fue nombrado arzobispo titular de Sutri y nuncio apostólico con funciones especiales. El Papa Juan Pablo II lo ordenó el 6 de enero de 1997.
Ejerció como vice-camarlengo de la Santa Iglesia Romana desde 2004 a 2011 y como pro-patrono de la Soberana Orden Militar de Malta desde 2009 hasta 2014.
Benedicto XVI lo creó cardenal de la Diaconía de Santa María Auxiliadora en la Vía Tuscolana en el Consistorio del 20 de noviembre de 2010.
Participó en el cónclave de 2013, en el cual se eligió al actual Papa Francisco.