(ZENIT – 13 sept. 2019).- Esta tarde, el Santo Padre se ha reunido con el Presidente de Lamborghini y los responsables de la Fundación OMAZE, que han organizado la subasta benéfica del coche «Huracán Lamborghini», puesto a disposición por el fabricante y firmado por el Papa Francisco el 15 de noviembre de 2017. El ganador del concurso, un ciudadano de la República Checa, también estuvo presente.
Durante la reunión, el Santo Padre recibió un cheque simbólico por la operación de unos 900.000,00 euros, informa el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, en declaraciones a los periodistas, la tarde del viernes, 13 de septiembre de 2019.
La última parte de los ingresos, unos 200.000 euros, se destinará a la reconstrucción del Seminario y de una guardería en Haití, que fueron destruidos por el terremoto de 2010.
El Santo Padre citó el Evangelio de Mateo en el capítulo 25 y «subrayó que la generosidad de este gesto de caridad, que llega directamente a los más pobres, corresponde a las palabras del pasaje evangélico», indica Bruni.
Proyectos financiados
Las sumas pagadas anteriormente se habían destinado a la Comunidad Papa Juan XXIII (mujeres víctimas de la trata y la prostitución) en el décimo aniversario de la muerte de Don Oreste Benzi y en el quincuagésimo aniversario (en 2018) de la Fundación Comunitaria (300.000,00 euros), a la Fundación «Ayuda a la Iglesia Necesitada» para la reconstrucción de la llanura de Nínive (200.000,00 euros), y a dos asociaciones indicadas por el fabricante de automóviles: Amici Centrafrica Onlus y GICAM (160.000,00 euros).