(ZENIT – 16 oct. 2019).- “Pidamos al Señor que ilumine la mente de todos los que se han encerrado en sí mismos, para que conozcan a Dios, que quiere la salvación de todos”.
Esta es la petición emitida por el Santo Padre, hoy 16 de octubre de 2019, durante su saludo a los peregrinos de lengua árabe, en particular a los procedentes de Irak, Siria y Oriente Medio, que se encontraban en la audiencia general.
Además, el Pontífice habló sobre como el apóstol Pedro nos enseña “a abrir nuestros corazones y a liberarnos de nuestra individualidad para hacer el bien, a fomentar el encuentro de los corazones con el Señor y a compartir la vida con los demás”.
En la catequesis de hoy, Francisco continuó con el ciclo sobre el Libro de los Hechos de los Apóstoles, en particular, el pasaje en el que Dios hace descubrir a Pedro la “universalidad de la salvación”.
