(ZENIT – 30 oct. 2019).- El Diaconado Permanente de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) anunció su deseo de crear una base de datos para conocer la realidad de los 263 Diáconos Permanentes que hay actualmente en todo el país.
Así lo informó la propia CEP, a través de un comunicado publicado el pasado 28 de octubre de 2019.
En efecto, de acuerdo a la nota, se pretende crear un directorio para conocer la realidad de los diáconos permanentes de todo el país, ofreciendo datos relevantes como «su situación laboral, calidad de vida y necesidades para acudir y ayudar a aquellos que se encuentran en situación crítica».
Asistencia 2a los diáconos
“Es importante este observatorio porque se centra en nuestra realidad, pues, el que estamos utilizando hasta el momento es del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) que abarca otra realidad”, explicó el diacono Francisco Inchausti.
“Tenemos que hacer esa asistencia urgentemente, sobre todo, a nuestros hermanos que se encuentran en el campo, porque debido a que muchos no tienen una jubilación asalariada necesitan algún tipo de cobertura para vivir con las condiciones básicas», remarcó.
«En la Arquidiócesis, por ejemplo, tenemos diáconos que son de profesión arquitecto, abogado, odontólogo, entonces al tener ese registro podremos determinar de qué manera nos ayudamos entre todos. El servicio profesional entre los Diáconos beneficia, porque se abaratan los costos y se practica la solidaridad», agregó en otro momento el diácono Inchausti.
263 diáconos
Los datos estadísticos determinan que el número de diáconos permanentes en Paraguay son 263, apuntó el secretario ejecutivo de esta Coordinación Pastoral, quien además aseguró que este proyecto que se encuentra en su etapa inicial ayudará a mejorar el trabajo ejecutivo del diaconado permanente.
El documento fue entregado a Mons. Pedro Collar por parte del secretariado del Diaconado Permanente y está en proceso de estudio para su aprobación y publicación.
Diaconado Permanente
De acuerdo a Vatican News, el Catecismo de la Iglesia Católica en el número 1554, un diácono permanente es un hombre ordenado que está destinado a ayudar y a servir a los obispos y a los presbíteros.
Los diáconos pueden estar casados, bautizar, bendecir matrimonios, asistir a los enfermos con el viático, celebrar la liturgia de la Palabra, predicar, evangelizar y catequizar. No obstante, a diferencia de un sacerdote, no pueden celebrar el sacramento de la Eucaristía, confesar o administrar el sacramento de la unción de los enfermos.
En el caso de hombres casados, se requiere una serie de requisitos, entre los que destacan: llevar más de 5 años de casados, tener una edad comprendida entre los 35 y 60 años y presentar estudios superiores.