(ZENIT – 7 nov. 2019).- Con motivo del 30º aniversario de la caída del Muro de Berlín, los obispos de la Unión Europea (UE) exhortan a todos los europeos a trabajar juntos “hacia una Europa libre y unida a través de un proceso renovado de diálogo (…)” para lograr “un futuro pacífico común”.
Así lo expresan en una declaración difundida ayer, 6 de noviembre de 2019, por la Comisión de Conferencias Episcopales de la Unión Europea (COMECE), formada por obispos delegados de los episcopados católicos de los 28 Estados miembros.
Compromiso de los europeos
Los prelados consideran que la caída del muro de Berlín el 9 de noviembre de 1989 “fue uno de los acontecimientos más importantes en la historia europea de las últimas décadas”, fruto del compromiso “de un gran número de europeos que expresaron de manera constante y pacífica su profundo anhelo por el cambio político”.
Al mismo tiempo, resaltan la dimensión profética del mismo: “Nos ha enseñado que construir muros entre las personas nunca es la solución y es una llamada a trabajar por una Europa mejor y más integrada”.
La declaración recuerda el papel crucial de san Juan Pablo II, que decía «¡Europa necesita respirar con dos pulmones!» y reconoce que el proceso de curación y reconciliación es “delicado y difícil” incluso en la actualidad, especialmente para las víctimas de “los regímenes opresivos”.
Signos de esperanza
No obstante, al mismo tiempo, los miembros de la COMECE desean “revivir y fomentar esos signos de esperanza” y las “expectativas para un futuro mejor en Europa y para todos los europeos que guiaron ese momento histórico en noviembre de 1989”.
Así, al final de la nota, invitan a orar al Señor “para que nos ayude a dedicarnos a una Europa movida por el Espíritu Santo, que es la raíz y el fundamento de la esperanza y la fuente y el poder de un nuevo compromiso con esos valores sobre los que se construye Europa: justicia, libertad y paz”.