(zenit – 13 feb. 2020).- Tanto el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) como la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) han acogido la Exhortación Apostólica “Querida Amazonía” con gratitud, alegría y “como un reto –indicó el CELAM– que hoy nos ha regalado el Papa Francisco”.
Ambos organismos eclesiales, con gran protagonismo en la fase presinodal, durante la Asamblea Especial del Sínodo Amazónico, y en la etapa postsinodal, han expresado su invitación a leer este documento del Santo Padre.
También animan a “orarla, estudiarla, discernirla, compartirla, y sobre todo, a asumirla como compromiso real para actuar en favor de la vida para esta Amazonía y para las futuras generaciones del mundo todo”, señalan el cardenal Claudio Hummes, el cardenal Pedro Barreto Jimeno y Mauricio López, miembros del Comité directivo de la REPAM.
De este modo, la Red Eclesial Panamazónica expresa su compromiso de abrazar juntos los sueños del Papa: luchar por los derechos de los más vulnerables, entre ellos los pueblos originarios, para que su voz sea escuchada y su dignidad asegurada.
Por su parte, el Comité Ejecutivo de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) se reunió en Brasilia en diciembre de 2019 con el fin de discernir la ruta a seguir después del Sínodo Amazónico, celebrado en Roma el pasado mes de octubre.
Conferencias Episcopal de América Latina
El CELAM, que reúne a las Conferencias Episcopales de América Latina y el Caribe, recibe la invitación del Papa Francisco, como Él lo dice: “Sueño con una Amazonía que luche por los derechos de los más pobres, de los pueblos originarios, de los últimos, donde su voz sea escuchada y su dignidad sea promovida; con una Amazonía donde se preserve esa riqueza cultural que tiene; con una Amazonia que custodie la hermosura natural que la engalana, con una vida que llene sus ríos y selvas; y sueño con comunidades cristianas capaces de encarnarse en la Amazonía” (Cf. n. 7)
La Exhortación, señala Mons. Miguel Cabrejos, presidente del CELAM, “nos muestra con claridad que la Iglesia está íntimamente unida con la Amazonía, caminando al lado de los pueblos y comunidades indígenas y de todo lo creado, como su fiel aliada en la defensa y promoción de sus derechos, en la preservación y cuidado del ambiente y en la construcción de una vida digna, como lo expresa el Papa Francisco en su sueño social, cultural, ecológico y eclesial”.
En este marco, la presidencia del CELAM invita a los Estados en coordinación con las Conferencias Episcopales de cada país a proteger la Amazonía, enfrentando con decisión: la deforestación, el flagelo de la trata de personas, la contaminación ambiental, entre otros graves problemas, porque la Amazonía es el Corazón del Planeta.