(zenit – 26 junio 2020).- Mons. Jesús Juárez, arzobispo emérito de Sucre, Bolivia, expresa su preocupación “por los eventos que están ocurriendo debido al coronavirus y cómo crece el número de personas afectadas, sospechosas e infectadas, especialmente en la penitenciaría de San Roque”.
Bolivia, a pesar de las medidas de cuarentena y del gobierno, ha experimentado varios brotes de COVID- 19, uno de los cuales ocurrió en las cárceles.
En una carta publicada en la página web de la arquidiócesis de Sucre el pasado 23 de junio de 2020, el prelado pide que se tomen medidas urgentes contra todos los que están en riesgo, y para mejorar la asistencia a los privados de libertad.
“Pido que los detenidos en espera de juicio por delitos menores reciban medidas sustitutivas, como el arresto domiciliario”, continúa la misiva. “Del mismo modo, se toma una medida urgente para todos aquellos sospechosos de tener el virus y para aquellos que dieron positivo por COVID-19 y no requieren hospitalización. Deben ser evacuados a otro lugar para ser tratados y puestos en cuarentena”, añade el prelado.
Igualmente, el obispo emérito indica que “hay que desinfectar todos los ambientes y colocar el arco de la desinfección para mejorar la bioseguridad del Penal”.
Finalmente, Mons. Jesús Juárez manifiesta su agradecimiento: “Apoyo los esfuerzos realizados para asignar un médico las 24 horas del día y proporcionar medicamentos. El apoyo psicológico que necesitan las personas privadas de libertad es esencial”.