(zenit – 12 julio 2020).- El Papa Francisco expresa su “dolor” al pensar en Santa Sofía y Estambul (Turquía), tras el rezo del Ángelus de este domingo, 12 de julio de 2020, en la plaza de San Pedro.
El Papa agregó espontáneamente algunas palabras al texto planeado, después de la oración del Ángelus, desde la ventana del estudio del Vaticano que da a la plaza de San Pedro. “Sono molto addolorato”, dijo el Papa Francisco, en su estilo simple y efectivo, que se puede traducir por: “Estoy muy dolido”.
Acababa de mencionar el Día Internacional del Mar y agregó: “Y el mar me lleva un poco lejos en mis pensamientos: a Estambul. Pienso en Santa Sofía y estoy muy dolido”.
La gran basílica cristiana de Constantinopla dedicada a Cristo “Sabiduría de Dios” fue construida en el siglo IV y luego reconstruida en el siglo VI. Sirvió como una mezquita del siglo XV, bajo Mehmet II, después de la toma de Constantinopla por los otomanos.
A partir de 1934, sirvió como museo, en un espíritu de diálogo, secularismo y universalismo: Mustafa Kemal Atatürk quería “ofrecerlo a la humanidad”, hizo desmontar los grandes paneles circulares con el nombre de ‘Alá, Mahoma y los califas: ya no se usaba para el culto musulmán.
Hace dos días, el 10 de julio, un Decreto del Consejo de Estado turco decidió reasignarlo al culto musulmán, a partir del viernes 24 de julio.
La decisión anunciada como probable había provocado muchas protestas de antemano, en nombre del diálogo y la tolerancia, en particular la de los patriarcas de Constantinopla, Bartolomé I, y de Moscú, Cirilo, transmitidos por los medios de comunicación del Vaticano, UNESCO y Francia
Francisco visitó la iglesia de Santa Sofía el 29 de noviembre de 2014. El Pontífice se detuvo particularmente bajo el mosaico de la Virgen en majestad.
Al final de esta visita a la basílica bizantina, el Papa escribió en el libro de visitas, en griego y latín: “Αγία Σοφία του Θεού” y “Quam dilecta tabernacula tua Domine”. Salmo 83 , es decir, en griego “Santa Sabiduría de Dios” y en latín: “Cuán adorables son tus moradas, Señor”. Salmo 83.