(zenit – 14 julio 2020).- El Consejo Mundial de Iglesias (CMI) y Consejo de Iglesias de Oriente Medio (MECC) se unen a las reacciones del mundo entero, por la decisión del presidente turco Recep Tayyip Erdogan de convertir la basílica ortodoxa de Santa Sofía (Estambul) en mezquita.
Santa Sofía fue construida hace 1.500 años como una catedral cristiana ortodoxa y convertida en una mezquita después de la conquista otomana en 1453. En 1934 se transformó en un museo y hasta ahora es Patrimonio Mundial de la UNESCO.
El pasado 10 de julio, un Decreto del Consejo de Estado turco decidió reasignarlo al culto musulmán, a partir del viernes 24 de julio.
La decisión anunciada como probable ya había provocado muchas protestas de antemano, en nombre del diálogo y la tolerancia, en particular la de los patriarcas de Constantinopla, Bartolomé I, y de Moscú, Cirilo.
“Dolor y desconcierto”
El reverendo Ioan Sauca, secretario general ad interim del CMI, dirigió una carta al dirigente turco expresando “dolor y desconcierto” ante la iniciativa.
“Al decidir convertir de nuevo a Santa Sofía en una mezquita, ha revertido esa señal positiva de apertura de Turquía y la ha convertido en una señal de exclusión y división”, explica Sauca al presidente turco.
Convertir un “lugar tan emblemático” como Santa Sofía en una mezquita “inevitablemente creará incertidumbres, sospechas y desconfianza, socavando todos nuestros esfuerzos por reunir a personas de diferentes creencias en la mesa del diálogo y la cooperación”, continúa la carta.
El CMI también teme que la decisión “fomente las ambiciones de otros grupos en otros lugares que tratan de derrocar el status quo existente y de promover nuevas divisiones entre las comunidades religiosas”.
Recurso de apelación
El Consejo de Iglesias de Oriente, miembro del CMI, manifiesta en un comunicado firmado por su secretario general, el libanés Souraya Bechealany, que la disposición del Gobierno turco constituye una “violación de la libertad religiosa y la coexistencia”.
De este modo, demandan a las Naciones Unidas y a la Liga de los Estados Árabes “que adopten una posición decisiva mediante la presentación de un recurso de apelación contra la decisión del Tribunal Supremo de Turquía de hacer justicia sobre la base de los principios de la libertad religiosa, así como de preservar el simbolismo histórico que representa la Iglesia de Santa Sofía”.
Coexistencia cristiano-musulmana
Para el MECC, “el elemento más peligroso es que esta decisión se enmarca en el contexto del camino de coexistencia cristiano-musulmán, cuya manifestación más destacada fue el 4 de febrero de 2019 en el ‘Documento sobre la fraternidad humana para la paz mundial y la convivencia’, que concluyó en la histórica reunión entre el Papa Francisco y el jeque Al-Azhar Al-Sharif Ahmed Al-Tayeb, así como todas las iniciativas ecuménicas y los diálogos interreligiosos de los últimos tres decenios”.
Esto hace que “esta decisión vaya más allá de un mero proceso de convergencia sobre el bien común y la paz frente al radicalismo y el extremismo”.
Palabras del Papa Francisco
El pasado domingo, 12 de julio de 2020, el Papa Francisco expresó su “dolor” al pensar en esta situación en Santa Sofía y Estambul.
El Papa agregó espontáneamente algunas palabras sobre este tema al texto planeado, después de la oración del Ángelus, desde la ventana del estudio del Vaticano que da a la plaza de San Pedro: “Sono molto addolorato”, afirmó el Papa Francisco, en su estilo simple y efectivo, que se puede traducir por: “Estoy muy dolido”.