(zenit – 4 agosto 2020).– El estado de salud del papa emérito Benedicto XVI no es motivo de especial preocupación, declara su secretario personal, monseñor Georg Ganswein, en declaraciones publicadas por la Oficina de Prensa de la Santa Sede al final del día de ayer, 3 de agosto de 2020.
Su biógrafo alemán, Peter Seewald, dijo a la agencia PNP que el papa emérito de 93 años estaba “extremadamente frágil” y que sufría una enfermedad infecciosa, un tipo de herpes en su cara que le causaba un dolor severo.
Seewald visitó recientemente el monasterio Mater Ecclesiae, donde Benedicto XVI se hospeda en los Jardines del Vaticano, para presentarle su nueva biografía sobre el papa emérito. Este último, indicó el biógrafo, se mostró optimista a pesar de la enfermedad que sufre desde que regresó de Baviera, y que esperaba poder escribir de nuevo cuando volvieran sus fuerzas.
De acuerdo a monseñor Ganswein, Benedicto XVI está saliendo de la fase aguda de la enfermedad, que es dolorosa pero no grave. El papa emérito visitó a su hermano Georg – que se encontraba en sus últimos días – en Alemania a finales de junio.
