(zenit – 10 agosto 2020).- Los episcopados de diversas partes del mundo han expresado en los últimos días su cercanía y solidaridad con el Líbano y con la Iglesia local, tras las fatídicas explosiones del pasado martes, 4 de agosto de 2020, en Beirut.
Esta tragedia sucedida en la capital libanesa ha dejado más de 150 muertos y unos 6.000 heridos. El pasado viernes, 7 de agosto de 2020, el Papa Francisco envió una primera ayuda de 250 mil euros para atender las necesidades de la Iglesia del Líbano en el país.
Estados Unidos
Mons. José H. Gomez, arzobispo de Los Ángeles, presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB), y Mons. David J. Malloy, obispo de Rockford y presidente del Comité de Justicia y Paz Internacional de la USCCB emitieron una declaración.
En ella señalan que en el Líbano, que ya se estaba recuperando de la situación económica y corrupción gubernamental, así como de la pandemia del coronavirus, la situación “es ahora aún más grave”.
Ante el llamado que realizó el patriarca del Líbano, cardenal Béchara Boutros Rai, en la declaración se anima “a los católicos y a todas las personas de buena voluntad a rezar por los afligidos y a donar generosamente para el auxilio ante el desastre en Catholic Relief Services en el Líbano”. Además, se exige al Gobierno de Estados Unidos que acelere toda la asistencia humanitaria al Líbano en esta hora de necesidad crítica.
Los obispos estadounidenses se unen en la oración del Papa Francisco el miércoles pasado en la que pidió que Líbano “supere la grave crisis que están experimentando”.
España
La Conferencia Episcopal Española (CEE), por su parte, difundió la carta del cardenal Omella al citado patriarca maronita del Líbano.
El cardenal Omella, presidente de la CEE y arzobispo de Barcelona, ofreció al patriarca su “saludo fraterno de consuelo y de paz en estos momentos tan duros para todos los libaneses por la terrible explosión acaecida en Beirut”.
En su carta, el Card. Omella transmite, en nombre de la CEE y de toda la Iglesia católica en España “nuestra condolencia y cercanía fraterna. Ofrecemos nuestra oración a la Trinidad Santa por el eterno descanso de los fallecidos la recuperación de los heridos y la reconstrucción de todo lo destruido”.
Al mismo tiempo, junto a la ayuda ya comprometida por Cáritas Española, la Comisión Ejecutiva de la CEE “quiere también ofrecer a esa Iglesia hermana una sencilla colaboración económica para colaborar en las necesidades más urgentes”.
Comunidad Europea
A través de un mensaje enviado por el presidente de la Comisión de las Conferencias Episcopales de la Comunidad Europea (COMECE), los obispos de Europa expresaron “la conmoción y la tristeza del pueblo de Beirut por las horribles y mortales explosiones”, así como “nuestras más profundas condolencias a las familias de las víctimas y a todos aquellos que han perdido a sus seres queridos: amigos, vecinos, colegas”.
“Rezamos por el Líbano para que a través de la dedicación de todos sus elementos sociales, políticos y religiosos, pueda hacer frente a este momento extremadamente trágico y doloroso”, continúa el mensaje.
Finalmente, la COMECE expresa su agradecimiento por la asistencia inmediata y los mecanismos humanitarios activados por la Unión Europea (UE) e invita “a que siga trabajando codo con codo con el Gobierno y el pueblo del Líbano, incluidas las comunidades religiosas locales, en este dramático momento histórico, también marcado por la pandemia de la COVID-19, una fuerte crisis económica y una grave inestabilidad regional”.
