(zenit – 7 septiembre 2020).- Según el portal Il Sismografo, el sitio web ilgazzettino.it comunicó la noticia de la muerte a los 89 años del zapatero del Papa Francisco, Carlos Samaria.
Durante cuarenta años fabricó los zapatos de Jorge Mario Bergoglio. Carlos, hijo de emigrantes de Porcen di Seren del Grappa, Belluno, Italia, murió en Buenos Aires, Argentina, la ciudad donde nació su amistad con el Santo Padre.
Un gran artesano
De acuerdo a Il gazzetino, el Papa nunca ocultó la estrecha amistad que lo unía a Carlos Samaria, quien creó sus zapatos de estilo “galoscia” desde que era director del colegio jesuita de San Miguel. Entre otras cosas, Samaria recordaba en una entrevista: “Bergoglio pidió, más que zapatos nuevos, la reparación de los viejos”.
Samaria hizo su fortuna gracias a su habilidad como artesano, convirtiéndose en un importante empresario en una conocida empresa especializada en calzado ortopédico. Ante todo ello, en abril de 2013 el nuevo pontífice, Francisco, llamó a su zapatero de confianza al otro lado del océano para decirle: “Tráeme zapatos nuevos en el Vaticano, pero negros como siempre”.
Los zapatos del Papa
Nada de zapatos rojos, según la tradición. Los zapatos que Carlos Samaria hizo a medida para el Pontífice tenían características muy claras: una parte superior lisa en cuero de ternera, de estilo austero, con cordones y sin adornos.
Unos zapatos cómodos, debido al hecho de que el el Obispo de Roma tenía un problema con el metatarso.
Ayer, 6 de septiembre, fueron los familiares Lucia De Cet y Samaria Giuliana quienes dieron la noticia de la muerte de este artesano serenense “estaba a menudo en contacto con el Santo Padre, incluso visitándolo y el mismo Bergoglio lo citó en varias ocasiones, incluso en artículos de periódico”, indicaron.
Condolencias de sus compatriotas
Desde la administración italiana Porcen di Seren del Grappa expresaron: “Samaria fue uno de los que realmente se hizo un nombre en el mundo. Como buen artesano representaba la figura del típico emigrante de Belluno”.
“Fue una persona que pudo llenar de orgullo a los parientes que le quedaban, pero también a todos sus compatriotas, dejando un gran recuerdo. De parte de los serenenses, lleguen todas sus más sinceras condolencias a su familia y a aquellos que lo amaron, incluyendo al Papa Francisco”.