(zenit – 28 oct. 2020).- “Un amor privilegiado”. El Papa Francisco ha rendido homenaje a los que protegen la vida hasta el final.
El Santo Padre saludó al pueblo polaco presente en la audiencia general del miércoles 28 de octubre de 2020, en el Aula Pablo VI del Vaticano, recordando la fiesta de san Juan Pablo II, el 22 de octubre, en el año del centenario de su nacimiento. El Papa ya había insistido en esta circunstancia el pasado miércoles 21 de octubre.
Karol Wojtyla, Juan Pablo II, nació el 18 de mayo de 1920 en Wadowice. Fue ordenado sacerdote el día de Todos los Santos, 1 de noviembre de 1956, en Cracovia
En italiano, antes de ser traducido por un colaborador de la Curia, Francisco subrayó que san Juan Pablo II “siempre ha exhortado a un amor especial por los abandonados e indefensos, desde su concepción hasta su muerte natural”.
Y expresó la siguiente plegaria: “Por la intercesión de la Virgen María y del santo Papa polaco, pido a Dios que suscite en el corazón de todos el respeto por la vida de nuestros hermanos y hermanas, especialmente los más frágiles e indefensos”.
El Pontífice alabó a aquellos que cuidan la vida hasta el final de sus fuerzas: “Pido a Dios que dé fuerza a aquellos que acogen la vida y la cuidan, incluso cuando esto requiere un amor heroico. ¡Dios os bendiga!”.
Hace ya una semana, el Obispo de Roma recordó la fiesta su santo predecesor diciendo “mañana celebramos la memoria litúrgica de san Juan Pablo II en el año jubilar del centenario de su nacimiento”.
El Papa Francisco enfatizó la forma en que el santo polaco rezó: “Él, un hombre de profunda espiritualidad, contemplaba cada día el luminoso rostro de Dios en la oración litúrgica y en la meditación de los salmos”.
Finalmente, añadió esta recomendación: “También insto a todos los cristianos a comenzar sus días con la alabanza del Señor, antes de tomar los caminos no siempre fáciles de la vida cotidiana”.