(ZENIT Noticias / Ciudad del Vaticano, 01.03.2022).- Inicia el mes de marzo con una buena noticia para los varones laicos que trabajan en cualquier dependencia del Estados de la Ciudad del Vaticano y de la Santa Sede: tres días de permiso retribuido con motivo del nacimiento de un hijo.
Es la nueva ordenanza que entra en vigor en el país más pequeño del mundo. De este modo, “Los padres empleados tendrán derecho, por los tres días de permiso, a percibir el 100% de su salario, que se tendrá en cuenta a todos los efectos relacionados con su antigüedad”. Como precisa el rescripto, “Los tres días de permiso, que se entenderán como días laborables, podrán disfrutarse de forma continuada y/o fraccionada en días completos y no por horas, en un plazo máximo de treinta días desde que se produzca el hecho, bajo pena de perder el derecho”. Es decir, si no se goza de este beneficio en el periodo explicitado se pierde el derecho.
El permiso, que ya tenía contemplaba por un periodo más amplio a las mamás, va incluso más allá pues en su última parte señala que “se aplicará también al padre adoptivo o de acogida”, considerando “El plazo de 30 días a que se refiere” otro apartado 1 que “se computará a partir de la fecha de entrada efectiva del niño en la familia”.
De este modo, el Vaticano adecúa sus leyes en materia familiar a lo que ya se hace en muchos otros países.
