(ZENIT Noticias / Ciudad del Vaticano, 18.03.2022).- En el contexto del Capítulo General de las Hermanas de Santa Dorotea de Frassinetti, el Papa recibió a las religiosas que participaron en el mismo. Al inicio de la audiencia el Papa pensó que habían elegido a una superiora general diferente a la precedente, motivo por el cual preguntó dónde estaba la nueva. Le respondieron que la habían confirmado por otro periodo de gobierno y entonces el Papa mencionó: “¡Ah, confirmada!… ¿No la echaron?”, y se escucharon risas.
El Papa explicó que un Capítulo General es un modo como los Institutos de Vida Consagrada ponen en práctica la sinodalidad. Y profundizando en la frase del Evangelio que profundizó el capítulo general de esta congregación el Papa dijo:
“La palabra guía para su trabajo fue la nota que el evangelista Mateo coloca al final del episodio de los Reyes Magos: «Y volvieron por otro camino…» (2:12). En el caso de los Reyes Magos se trataba, efectivamente, de una ruta alternativa, para escapar de las conspiraciones del rey Herodes. Pero «otro camino» también puede significar una forma diferente, nueva, de caminar. Y, de hecho, también se han referido a los discípulos de Emaús, que, tras el encuentro con el Señor, volvieron a Jerusalén completamente cambiados. El camino era el mismo, pero era «otro»: ya no era el camino del atardecer, sino el de un nuevo amanecer; ya no era el camino de la tristeza, sin esperanza, sin futuro, sino otro, nuevo, lleno de asombro, de gratitud, incluso de arrepentimiento por el propio corazón que tardaba en creer, pero ligero y dulce por la gracia concedida por el Señor Resucitado.
Como aquellos dos discípulos, también uds, después de estos días de encuentro especial con el Maestro, con toda la confianza que depositan en él, pueden ahora emprender el camino que él mismo les muestra en la vida del Instituto de hoy. ¡Qué hermoso es, queridas hermanas, tomar otro camino, uno diferente, cuando es el mismo Señor quien nos lo muestra! ¡Qué bueno es tomar otro camino cuando lo descubrimos en el diálogo fraterno!”.
El Papa mencionó que en la Iglesia, los Institutos de Vida Consagrada son depositarios de una gran herencia y una rica tradición de sinodalidad. A continuación se detuvo en el estilo de comunión, participación y misión. Ofrecemos a continuación una traducción íntegra de esos tres apartados profundizados por el Papa en un discurso en italiano y traducido por ZENIT al español.
1) Comunión
De Santa Paula Frassinetti, vuestra fundadora, podemos aprender la comunión. Amó a Jesucristo con pasión, un amor que la llevó a testimoniar a los demás esa vida de comunión que ella fue la primera en experimentar. A Santa Paula, como a otros santos fundadores y fundadoras, también le fascinaba «la unidad de los Doce en torno a Jesús, la comunión que caracterizó a la primera comunidad de Jerusalén». Y «al dar vida a su propia comunidad […] pretendía reproducir esos modelos evangélicos, ser un solo corazón y una sola alma, gozar de la presencia del Señor (cf. Perfectae caritatis, 15)» (Carta para el Año de la Vida Consagrada, 21 de noviembre de 2014, 2).
2) Participación
Santa Paula Frassinetti también nos muestra el camino de la participación. De hecho, recorrió el camino de la comunión a la participación, dejándose perturbar por los «gritos», las carencias, las urgencias de su tiempo, hasta el punto de sentirse obligada a superarse, a ir más allá de sí misma. Y ella, que no había asistido a la escuela, tuvo el valor de dar vida en la Iglesia a una Congregación dedicada a la educación, implicando a muchas personas y creando espacios de participación. Este proyecto suyo, fecundado por el Espíritu Santo, lo vemos hoy en cuatro continentes, donde estáis presentes; y vosotros mismos os habéis enriquecido con la experiencia intercultural, también en las dinámicas comunitarias (cf. CICLSAL, Instrucción: Caminar desde Cristo, 7).
3) Misión
Santa Paula también te mostró el camino a la misión. Recibió el carisma de «evangelizar educando y educar evangelizando». Esta es la misión que Dios le encomendó y que se ha convertido en su misión. Y en la medida en que seáis fieles a esta misión, seréis una presencia generadora en la Iglesia. Todos lo sabemos por experiencia, porque todos hemos tenido la experiencia de ser educados, en la familia, en la escuela, en la parroquia…
En cierto sentido, no hay obra más generadora que la de la educación. Y también aportas esta riqueza siempre nueva a las diferentes realidades en las que estás presente. Así pues, su carisma y su misión son siempre pertinentes, pero yo diría que especialmente hoy, en un contexto cultural y social que exige un nuevo «pacto educativo». De hecho, «nunca antes había sido necesario aunar esfuerzos en una amplia alianza educativa para formar personas maduras, capaces de superar fragmentaciones y oposiciones y reconstruir el tejido de relaciones para una humanidad más fraterna» (Pacto Mundial por la Educación, 12 de septiembre de 2019). Por ello, os animo a dar lo mejor de vosotros mismos una y otra vez para «revitalizar el compromiso por y con las nuevas generaciones, renovando la pasión por una educación más abierta e inclusiva, capaz de una escucha paciente, de un diálogo constructivo y de una comprensión mutua» (ibid.).
Conclusión
El Papa finalizó diciendo a las religiosas que “en este momento de la historia marcado por una grave crisis, primero con la pandemia del Covid-19 y ahora con una guerra que perjudica a todos, os exhorto a continuar con ímpetu vuestro camino, llevando adelante el método de educación de santa Paula: por el camino del corazón y del amor, «para que cada ser humano sea autor de su propio destino» (Encíclica Fratelli tutti, 187)”. A continuación dio la bendición, aseguro su intercesión y pidió rezar por él. También obsequió un libro sobre las críticas y llamó a la crítica la peste de una comunidad.