(ZENIT Noticias / Ciudad del Vaticano, 10.06.2022).- Por la mañana de este viernes 10 de junio, el Papa recibió en audiencia a la Presidenta de la Comisión Europea, la sra. Ursula von der Leyen. La audiencia, que se desarrolló en el Palacio Apostólico Vaticano, estuvo seguida de un encuentro entre la presidenta von der Leyen y el Cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado, quien estuvo acompañado por Mons. Paul Richard Gallagher, Secretario para las Relaciones con los Estados y las Organizaciones Internacionales.
Según la Sala de Prensa de la Santa Sede, “Durante las cordiales conversaciones mantenidas en la Secretaría de Estado, se habló de las buenas relaciones bilaterales y del compromiso común de trabajar para poner fin a la guerra en Ucrania, prestando especial atención a los aspectos humanitarios y a las consecuencias alimentarias de la continuación del conflicto”. Con el Papa la presidenta habló también de Ucrania, del clima y arquitectura sostenible.
La conversación continuó con las conclusiones de la Conferencia sobre el Futuro de Europa y sus consecuencias para la futura configuración de la Unión, Conferencia organizada por la Pontificia Academia de las Ciencias, en la que Ursula von der Leyen participó como ponente. Tras su encuentro con el Papa, la presidenta de la Comisión Europeo comentó desde Twitter: “Verdaderamente contenta de encontrarme hoy de nuevo con Su Santidad Francisco en Roma. Apoyamos a los que sufren por la destrucción en Ucrania. Esta guerra debe terminar, devolviendo la paz a Europa”.
Conferencias sobre el Futuro de Europa
La Pontificia Academia de las Ciencias, con sede en el interior del Vaticano, organizó una Conferencia sobre el futuro de Europa. En ese contexto la presidenta von der Leyen ofreció el discurso que ofrecemos a continuación traducido al castellano.
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Estimado Dr. von Braun,
Su Eminencia, Cardenal Turkson,
querido John Schnellnhuber,
Señoras y señores,
Estoy muy contento de estar hoy aquí. En la Academia Pontificia de las Ciencias, donde el compromiso con la ciencia y el progreso se une a la devoción por los valores.
Es un verdadero honor que hayan puesto la Nueva Bauhaus Europea en el centro de su conferencia. Demuestra el impacto que ya tiene la iniciativa: no sólo para encontrar soluciones inspiradoras al cambio climático, sino también para ayudar a mejorar la vida de las personas en la forma en que diseñamos y construimos nuestros hogares y ciudades. Así es como se produce el cambio en las sociedades democráticas: de abajo para arriba, donde todos pueden formar parte de la solución.
Al igual que la Academia Pontificia, la Nueva Bauhaus Europea se guía por valores. Y son tres principios en particular de los que me gustaría hablar hoy.
1) El primer principio es la sostenibilidad. Las personas de fe creen que la Creación nos fue confiada a nosotros, los seres humanos, pero no nos pertenece. Nuestra responsabilidad es preservarla, cuidarla y transmitirla a las generaciones futuras. Pero durante demasiado tiempo, la humanidad ha olvidado esta responsabilidad. Generación tras generación ha explotado la naturaleza más allá de los límites de nuestro planeta. Hemos tomado, contaminado y eliminado. Y esto tiene que terminar. Necesitamos un nuevo modelo, que devuelva a la naturaleza en lugar de quitársela. Esto es el Pacto Verde Europeo. Queremos convertir a Europa en el primer continente climáticamente neutro para 2050. Hemos plasmado esta ambición en una ley vinculante.
Como región altamente innovadora e industrializada, Europa puede demostrar que es posible: Crear una economía circular que valore intrínsecamente la naturaleza y la salud humana. Que no hay que sacrificar el crecimiento económico por la reducción de las emisiones de carbono. Y que nuestras sociedades pueden prosperar, sin poner en riesgo a las generaciones futuras. El profesor Schnellnhuber habló de la importancia del sector de la construcción en la transición verde. Los edificios son responsables de casi el 40% de las emisiones de carbono de Europa. Esto es más que las emisiones de CO2 de toda la economía japonesa. Por eso, una de las primeras estrategias que planteamos en el marco del Pacto Verde Europeo fue una oleada de renovación. Está respaldada con 53.000 millones de euros de nuestro plan de recuperación, NextGenerationEU.
La Nueva Bauhaus Europea funciona como una incubadora para este plan. Tenemos que devolver la naturaleza a nuestras ciudades. Por ejemplo, nuestro nuevo centro de investigación europeo en la ciudad de Sevilla, en el sur de España. Hace poco, la Comisión Europea dio el visto bueno a este nuevo edificio. Albergará a más de 400 científicos internacionales. El edificio no sólo será totalmente neutro en carbono, sino que será energéticamente positivo. Esto significa que la electricidad renovable adicional que genere podrá almacenarse e incluso compartirse con la red. Un edificio que devuelve más de lo que toma. Este es el poder de la innovación ecológica.
Pero la Nueva Bauhaus Europea va más allá. Creemos que todo lo que hacemos, todo lo que construimos, no sólo debe aspirar a la funcionalidad, sino también a la belleza. Esto me lleva al segundo principio de la Nueva Bauhaus Europea:
2) El ser humano necesita la belleza para prosperar. Y aquí no me refiero sólo a la estética. También me refiero a otro tipo de belleza: la calidad de vida. Hay un proyecto en Luxemburgo que ha ganado recientemente un premio de la Bauhaus: Un nuevo edificio para una guardería y una escuela primaria. Se construyó casi en su totalidad con madera. También se utilizaron otros elementos naturales, como paja, arcilla y lana, todos ellos de origen local. Como se sabe, la madera cosechada de forma sostenible puede reducir las emisiones de carbono de un edificio hasta en un 60%. El Papa Francisco tiene mucha razón cuando dice que los seres humanos no están destinados a ser inundados por el cemento y el acero. Construir más con elementos naturales, como la madera, es bueno para el planeta y para el bienestar de las personas.
El principio de sostenibilidad y belleza de la Bauhaus se traduce bien en otros sectores de nuestra economía. Como la industria de la moda. La Nueva Bauhaus Europea trabaja con la industria creativa. Este sector emplea a más de 2 millones de personas en Europa. El objetivo de esta cooperación es promover materiales basados en la naturaleza, la reducción de residuos y el uso de productos químicos en el proceso de producción. Hay un mercado creciente para esto en todo el mundo. Los ciudadanos de todo el mundo quieren productos asequibles que sean sostenibles y bellos. Las marcas culturales y creativas europeas de alta gama representan más del 70% del mercado mundial. Este es un ejemplo más de cómo la Nueva Bauhaus Europea puede promover y acelerar la transición verde. Para el éxito del «Green Deal» europeo, es muy importante que la gente lo asuma como un proyecto propio. Porque un cambio tan fundamental requiere algo más que dinero y leyes. Requiere millones de ideas y el entusiasmo de ciudadanos, empresas y científicos por igual.
3) Esto me lleva al tercer y último punto. El Pacto Verde Europeo sólo tendrá éxito con la participación de todos. Y la Nueva Bauhaus Europea ofrece un marco maravilloso para ello. Comenzamos la iniciativa con un periodo de co-creación. Se celebraron cientos de debates y eventos. Cientos de expertos, pero también miles de ciudadanos contribuyeron con sus ideas. La participación es la clave de nuestro éxito. Y ya vemos que funciona:
Casi dos años después es difícil contar todas las iniciativas populares y ciudadanas en torno a la Nueva Bauhaus Europea. Y a veces incluso nos sorprendemos al conocer nuevas iniciativas. Una de ellas es la que está desarrollando actualmente conceptos de la Nueva Bauhaus Europea para las escuelas, con el fin de que los edificios sean más sostenibles, pero también mejores para los alumnos y los profesores. En la República Checa, ciudadanos y arquitectos están trabajando en un concepto para transformar toda su ciudad en un lugar mejor para vivir. El Nuevo Premio Europeo Bauhaus que entregaremos este sábado es un gran espejo de este movimiento: hemos recibido varios miles de solicitudes de toda la Unión Europea, desde Chipre hasta Finlandia, desde los Países Bajos hasta el este de Polonia. Se premiarán los mejores proyectos, pero todos son grandes ejemplos de lo que es posible.
Para apoyar a todos los que lideran la transición verde sobre el terreno, hemos lanzado recientemente el Nuevo Laboratorio Europeo de la Bauhaus. Es un espacio de co-creación para proyectos que mejoran nuestra vida cotidiana. Y las Bauhaus se están extendiendo: Una Bauhaus de las Montañas liderada por la región del Norte de Italia Sur-Tirol una Bauhaus Nórdica en torno a la circularidad y la arquitectura baja en carbono y una Bauhaus de la región del Danubio que reúne a todos los países que se encuentran a lo largo del maravilloso río. Además, con todos los socios -más de 450 organizaciones entretanto- el Laboratorio está trabajando en una estrategia de etiquetado para definir lo que hace que los edificios o productos sean «tipo Nueva Bauhaus Europea». Este tipo de política es ascendente, co-creativa e impulsada por las soluciones. La transición ecológica es más sostenible cuanto más participa la gente en ella.
Hoy mismo daremos el pistoletazo de salida al primer Festival de la Nueva Bauhaus Europea. Donde todos los que ya están comprometidos con la iniciativa, o quieren contribuir, pueden reunirse y compartir. Se celebrarán más de 200 eventos locales en toda Europa. Más de 100 proyectos se expondrán en Bruselas, y eso es sólo una pequeña selección de todos los que se han presentado.
Señoras y señores,
la Nueva Bauhaus Europea está diseñada por todos, para todos. Es realmente una visión compartida. Necesitamos reunir a todas las personas de buena voluntad. Personas que quieren un planeta más sano, que quieren una mejor calidad de vida, que quieren ser parte de la solución.
Como escribió el Papa Francisco en la Carta Encíclica Laudato Si’:
«La humanidad todavía tiene la capacidad de trabajar juntos en la construcción de nuestra casa común. Es hora de reunir a toda la familia humana. Porque sabemos que las cosas pueden cambiar«.
Traducción del original en lengua inglesa realizado por el P. Jorge Enrique Mújica, LC, director editorial de ZENIT.
