Por: Elentir
(ZENIT Noticias – Contando Estrelas / Vigo, 20.08.2022).- En su discurso contracultural y de rechazo a Occidente, la izquierda está asumiendo unas tesis ideológicas cada vez más disparatadas y ridículas.
Polémica en EEUU por un artículo que tacha el Rosario de «símbolo extremista»
El último de esos disparates fue publicado hace unos días por uno de los representantes más conocidos del progresismo mediático de EEUU: la revista digital The Atlantic, en forma de un artículo de Daniel Panneton alertando contra los Rosarios católicos. El artículo ha provocado una polémica en EEUU, ya que se publicó inicialmente con el título “How the Rosary became an extremist symbol” (Cómo el Rosario se convirtió en un símbolo extremista).
Ya en su primer párrafo, Panneton afirma:
“el rosario ha adquirido un significado militarista para los católicos radicales-tradicionales (o ‘rad trad’). En esta franja extremista, los rosarios se han entretejido en una política conspirativa y una cultura absolutista de las armas. Estos tradicionalistas radicales armados han asumido la noción espiritual de que el rosario puede ser un arma en la lucha contra el mal y la han convertido en algo peligrosamente literal”.
El autor critica al Papa Francisco por hablar de «combate espiritual» contra el mal
El artículo también habla de la importancia que tiene el Rosario para millones de creyentes y advierte: “muchos se sustentan genuinamente en el concepto de la teología católica de la Iglesia Militante y la tradición de considerar el rosario como un arma contra Satanás”. Tal vez preocupado porque los católicos tengamos la intención de acribillar al demonio con oraciones, Panneton afirma: “Como dijo el Papa Francisco en un discurso de 2020: ‘No hay camino hacia la santidad… sin combate espiritual’”, y Francisco es sólo uno de los muchos funcionarios de la Iglesia que han respaldado la idea del rosario como arma en esa lucha.
Escandalizado por los «rosarios de combate» de la Guardia Suiza Pontificia
Uno de los párrafos más hilarantes del artículo señala que una tienda católica “vende réplicas de los rosarios entregados a los soldados estadounidenses durante la Primera Guerra Mundial como ‘rosarios de combate’. Los consumidores más exigentes también pueden comprar un permiso de “portación oculta” para su rosario de combate y una caja de almacenamiento sacramental que se asemeja a una lata de municiones. En 2016, la Guardia Suiza Pontificia aceptó una donación de rosarios de combate; durante una ceremonia en el Vaticano, su comandante describió el regalo como “el arma más poderosa que existe en el mercado”. A continuación, el autor del artículo se pone a desbarrar contra el “militarismo” diciendo que “glorifica una mentalidad guerrera y nociones de masculinidad y fuerza masculina”.
Cabe preguntare qué sería hoy en día de la democracia si unos señores muy militaristas no hubiesen arriesgado sus vida –y en muchos casos incluso muerto en combate– en defensa de la Libertad frente al nazismo, para que personajes como Panneton puedan publicar libremente sus opiniones. ¿Panneton preferiría que Occidente se hubiese enfrentado a Hitler con velas y alguna canción de protesta? En su ensimismamiento ideológico, gran parte de la izquierda no tiene reparos en mostrar su ingratitud por los que asumieron tantos riesgos en defensa de la democracia. Es una actitud repugnante.
El curioso concepto de «odio» que tiene el autor de ese artículo
Lo más curioso del caso que nos ocupa es que, según reveló la web Townhall este martes, Panneton es gerente del Online Hate Research & Education Project, que desarrolla un programa contra los discursos de odio regado con una generosa subvención de 340.000 dólares por el gobierno de Canadá, en manos del progresista Justin Trudeau. Esa entidad sostiene una web, hatepedia.ca, que incluye entre los “símbolos de odio” el Sagrado Corazón de Jesús y la antigua Bandera de Canadá. Significativamente, en dicha web no se incluye ni un solo símbolo de los utilizados por extremistas islámicos.
¿Tendremos que obtener una licencia de armas para poder rezar?
Imaginemos por un momento lo que pasaría si alguien hablase del Misbaha islámico (un objeto religioso con una apariencia similar a la del Rosario católico) en los mismos términos que Panneton ha usado para descalificar el Rosario católico. Los gritos de “islamofobia” no tardarían en escucharse desde la propia izquierda, mezclado con recordatorios de que un musulmán que se limita a rezar no es una amenaza para nadie. Pero un católico rezando el Rosario sí que es algo que le quita el sueño a algunos progresistas porque consideran que está utilizando un arma. ¿Tendremos que obtener una licencia de armas para poder rezar? ¿Los progresistas piensan pedir que los oratorios católicos sean equiparados legalmente con galerías de tiro o depósitos de armas? ¿La izquierda piensa fabricarle a Satanás un chaleco a prueba de Rosarios?
El autor del artículo también intentó criminalizar al movimiento provida
Por si no llegaba con todo lo anterior, en mayo Panneton publicó un artículo intentando vincular a quienes se oponen al aborto con el antisemitismo y con el supremacismo blanco. El artículo defendía abiertamente el aborto, refiriéndose a él como “derecho”. Al final estamos en la misma situación que nos encontramos siempre. La izquierda utiliza sistemáticamente la palabra “odio” para criminalizar a todos los que no comulgan con sus dogmas, y casi siempre haciendo la vista gorda hacia verdaderas formas de odio que son sostenidas por colectivos que a la izquierda le resultan agradables y simpáticos. ¿Cabe imaginar una actitud de odio más infame que ésa que considera que es legítimo matar a un ser humano inocente e indefenso? ¿Los que nos van a aleccionar contra el “odio” son los mismos que sostienen posiciones tan odiosas como ésa?