Por: Ariel Beramendi
(ZENIT Noticias / Roma, 20.12.2022).- El pasado 17 de diciembre cumpliste 86. Feliz cumpleaños. Toda la Iglesia se unió en un abrazo y muestras de cariño hacia tu persona.
Creo que no ha sido un año fácil: lo recordaremos por las lágrimas ante la imagen de la Inmaculada pero -siendo sinceros- también ha sido un año muy intenso. Lleno de actividades, decretos, reformas; y todos hemos seguido con trepidación las noticias sobre tu salud.
En fin, ha sido un año como la vida misma. Con altibajos, en el que el tiempo es arena fina que se escurre entre los dedos. Pocos meses más y serán diez años que nos acompañas y guías.
Esta semana me llamó la atención que los periódicos informaron que el Vaticano pidió disculpas por algunas apreciaciones tuyas sobre la guerra y la violencia rusa. Sí, la Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, el pasado jueves 15 de diciembre dijo que les había llegado un mensaje oficial. En sus palabras el mensaje decía: «La Secretaría de Estado vaticana pide disculpas a la parte rusa. La Santa Sede siente un profundo respeto por todos los pueblos de Rusia, por su dignidad, su fe y su cultura»; en todo caso, en Roma, el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, no confirmó, ni desmintió ese mensaje, pero declaró: «Por el momento sólo puedo decir que ha habido contactos diplomáticos en este sentido».
Como nos pides, seguiremos rezando por la paz, y seguiremos tu sugerencia clara del miércoles pasado durante la Audiencia General: «vivir una Navidad más austera y ser más solidarios con el pueblo ucraniano».
Faltan pocos días para Navidad, este año la misa de Nochebuena, en la Basílica de San Pedro, será a las 19:30, seguramente se adelantó el horario para favorecer la participación de los fieles que irán a verte, pero también te ayudará a descansar mejor y cuidar tu salud, que es importante, aunque acabas de decir que: se gobierna con la cabeza y no con las rodillas.
Esa afirmación tan gráfica la hiciste en otra entrevista exclusiva publicada en el periódico español ABC. Lo que más llamó la atención al mundo entero fue que por primera vez dijiste que tu renuncia, en caso de impedimento médico, está ya firmada. Sabes, desde el punto de vista informativo, aquello fue como un vals que abría la danza de un festival informativo, en el que las grandes cadenas periodísticas, in crescendo, comenzaron a especular.
Sé que muchos lectores que absorben información se quedan solo en los titulares, y no se enteran que ese documento fue firmado hace casi diez años, y que también tus predecesores lo habían hecho. Me pareció esclarecedor, que cuando el entrevistador te dijo: «Es la primera vez que usted lo dice», le contestaste: «sí, lo digo para que sepa». Pues, ahora todo el mundo lo sabe y ya no es tema innombrable como tantos otros.
Gracias por esa entrevista, como siempre, me ayuda a entender mejor tu forma de ser y de pensar, de vivir tu fe dando testimonio, y también cómo estás viviendo esta fase de tu vida.
Te deseo una serena y feliz Navidad.
Ariel Beramendi es sacerdote y vive en Roma. Su cuenta de Twitter es esta: https://twitter.com/ariel_beramendi