(ZENIT Noticias / Monterrey, 11.02.2023).- Los miembros del Sínodo General de la Iglesia de Inglaterra también votaron a favor de «lamentar y arrepentirse» por el fracaso de la Iglesia a la hora de acoger a las personas LGBTQI+ y por el daño que las personas LGBTQI+ han sufrido en las iglesias.
Una moción que detalla y reconoce una serie de propuestas presentadas por los obispos sobre la identidad humana y el matrimonio fue aprobada por mayoría en las Cámaras de Obispos, Clero y Laicos tras un histórico debate de dos días.
A principios de la segunda semana de febrero, los miembros del Sínodo también se reunieron en pequeños grupos para considerar y comentar un conjunto de borradores de textos conocidos como Oraciones de amor y fe, que podrían utilizarse voluntariamente en las iglesias para las parejas que han marcado una etapa significativa de su relación, como el matrimonio civil o la unión civil.
Los comentarios del Sínodo servirán ahora de guía a los obispos, que afinarán cuidadosamente esos textos y prepararán nuevas orientaciones pastorales para la Iglesia sobre la sexualidad y el matrimonio en los próximos meses, antes de que las oraciones se recomienden formalmente para su uso en las iglesias.
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, y el arzobispo de York, Stephen Cottrell, dijeron: «Ha sido un largo camino para llegar a este punto. Por primera vez, la Iglesia de Inglaterra acogerá públicamente, sin reservas y con alegría a las parejas del mismo sexo en la iglesia. La Iglesia sigue teniendo profundas diferencias sobre estas cuestiones que van al corazón de nuestra identidad humana. Como arzobispos, estamos comprometidos a respetar la conciencia de aquellos para quienes esto va demasiado lejos y a asegurar que tengan todas las garantías que necesitan para mantener la unidad de la Iglesia mientras esta conversación continúa. Esperamos que el debate reflexivo y orante de hoy marque un nuevo comienzo para la Iglesia mientras buscamos un camino hacia adelante, escuchándonos unos a otros y, sobre todo, a Dios. Por encima de todo, seguimos rezando, como el propio Jesús, por la unidad de su Iglesia y para que nos amemos los unos a los otros».
La “obispa” de Londres, Sarah Mullally, que dirigió el debate y preside el grupo que supervisó el desarrollo de las propuestas, dijo: «Este es un momento de esperanza para la Iglesia. Sé que lo que hemos propuesto no es suficiente para muchos, pero es demasiado para otros. Rezo para que lo que se ha acordado hoy represente un paso adelante para todos nosotros en la Iglesia, incluidas las personas LGBTQI+, ya que seguimos comprometidos a caminar juntos». Y concluyó: «Siempre hemos dicho que escucharemos atentamente al Sínodo, así que en los próximos meses reflexionaremos sobre todo lo que se ha dicho y prepararemos nuevas orientaciones pastorales para la Iglesia en materia de sexualidad y matrimonio. También perfeccionaremos los textos de las Oraciones de Amor y Fe».
Las votaciones se registraron de la siguiente manera:
Obispos: 36 a favor, 4 en contra, 2 se abstuvieron.
Clero: 111 a favor, 85 en contra, 3 abstenciones
Laicos: 103 a favor, 92 en contra, 5 abstenciones
