Por: Ariel Beramendi
(ZENIT Noticias / Roma, 20.06.2023).- La primera buena noticia que debemos comentar es que el viernes 16 de junio el Pontífice regresó al Vaticano, después de pasar 9 días en el hospital Gemelli de Roma. Como sabemos, fue internado para ser operado de una hernia abdominal.
El médico que lo operó aseguró en sendas entrevistas que la salud del Papa está estable y que ahora podrá continuar con su misión que este verano incluye algunos viajes a Portugal, Francia y Mongolia.
Durante el rezo mariano del Ángelus, el Papa agradeció las oraciones por su salud y en su reflexión, además de llamar a la paz, recordó a los casi 600 fallecidos cerca de Grecia, en una embarcación que intentaba llegar a Europa. Eran personas de todas las edades que buscaban un futuro mejor. Francisco también recordó a los 40 estudiantes que fueron víctimas de un brutal atentado en una escuela de Uganda, esos jóvenes fueron asesinados por un grupo islamista que los atacó y quemó dentro los dormitorios en los que vivían. Me pregunto si los grandes medios de comunicación difundieron esta noticia ante la opinión pública.
En otro orden de cosas, fueron condenados los dos activistas que el pasado año se habían pegado al grupo escultórico Laocoonte, una obra que data del año 40 antes de Cristo y que es una de las piezas más famosas de los Museos Vaticanos. Este tipo de protestas se han estado repitiendo en varios museos europeos. Sin embargo, en esta ocasión la justicia vaticana los procesó y declaró culpables por atentar contra este bien cultural de inestimable valor. Si bien la pena de nueve meses fue suspendida, deberán pagar la suma de 28.000 euros por los costos de la restauración y el resarcimiento de daños.
Esta semana también fue noticia la oficialización de que el arzobispo Georg Gänswein tendrá que dejar el Estado Pontificio el próximo 1º de julio. El jueves 15 de junio, un comunicado de pocas líneas ponía fin a muchos rumores sobre su futuro; y es que el arzobispo alemán estuvo bajo los reflectores, no solo de programas televisivos y revistas, por algunas acciones que tuvieron su momento álgido cuando publicó un libro después del fallecimiento del papa Benedicto, de quién fue su secretario personal durante décadas. El arzobispo alemán, a sus 66 años, volverá a Friburgo y, por el momento, sin ningún cargo específico.
Culminamos nuestra crónica vaticana informando que el Papa respondió a la carta que el presidente boliviano, Luis Arce, le envió hace algunas semanas expresando el repudio a los abusos sexuales cometidos por miembros del clero, en particular por misioneros jesuitas españoles que administraban internados en ese país.
La carta que fue dada a conocer por el jefe de estado boliviano lleva la fecha del 31 de mayo y en ella el Obispo de Roma expresa su dolor, sentimientos de vergüenza y consternación por lo ocurrido. Francisco afirma que “los ministros de la Iglesia deben ser “custodios” y garantes del bien y del futuro de las jóvenes generaciones”. Y si de jesuitas se trata, el pasado jueves 15 de junio se dio a conocer que el padre Rupnik, famoso por sus mosaicos, ha sido expulsado de la Compañía de Jesús.
Nos despedimos anunciando que el mes de julio nuestras crónicas vaticanas también tomarán vacaciones de verano por un mes.
Ariel Beramendi es sacerdote y vive en Roma.