(ZENIT Noticias – IFN / Washington, 24.08.2023).- Una reciente audiencia ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes sobre «violaciones de las garantías procesales y tratamientos de afirmación de género» arrojó luz sobre el carácter experimental de los procedimientos médicos de «afirmación de género». Durante la audiencia, el representante Mike Johnson mostró una entrevista en vídeo con el Dr. Blair Peters, cirujano que realiza operaciones de transexualidad en la Universidad de Salud y Ciencias de Oregón. La entrevista, que ha resurgido en las redes sociales, revela la naturaleza radical y poco estudiada de las cirugías de «confirmación de género».
El Dr. Peters está especializado en operaciones de reasignación de sexo, sobre todo en la zona genital. Su objetivo es reconstruir los genitales del paciente para alinearlos con su identidad de género. Para ello se practica una vaginoplastia a los chicos que se identifican como chicas y una faloplastia a las chicas que se identifican como chicos. En la entrevista también se habla de las cirugías «no binarias», que pretenden crear una combinación de genitales masculinos y femeninos para combatir los prejuicios binarios percibidos en la sociedad.
Sin embargo, estas cirugías presentan riesgos y complicaciones importantes, como reconoció el Dr. Peters. Los efectos a largo plazo de estos procedimientos, especialmente en menores, siguen siendo desconocidos. A pesar del carácter experimental y del daño potencial para los pacientes, los ideólogos de género defienden la libertad de autorrealización para redefinir el género y romper el sistema binario hombre/mujer.
El concepto de identidad de género se basa en el binario de género, arraigado en las categorías objetivas de hombre y mujer. Sin embargo, los defensores de la ideología de género se oponen a este binario, argumentando que hay más de dos géneros. Esto cuestiona la verdad fundamental de que toda persona humana es hombre o mujer. Sin embargo, el campo de la medicina que «afirma el género» se está adaptando a esta ideología no binaria, ignorando los hechos, la realidad y la comprensión científica.
Uno de los aspectos más preocupantes es que se somete a niños a estas cirugías experimentales. Las menores que se someten a cirugía genital se enfrentan a una dolorosa recuperación, infertilidad, incontinencia y otras consecuencias a largo plazo. La capacidad de los niños para tomar ciertas decisiones suele estar limitada debido a su inmadurez emocional y mental. Permitir la mutilación permanente de cuerpos sanos mediante cirugía experimental es incompatible con las leyes vigentes que definen la mayoría de edad.
La audiencia del Comité Judicial de la Cámara de Representantes pone de relieve la naturaleza precaria de la ideología de género. La presión a favor de la «afirmación del género» hace caso omiso de los riesgos y carece de una comprensión científica adecuada. Es esencial adoptar un enfoque cuidadoso y crítico del concepto de género y de los procedimientos médicos asociados.
