Luca Volonte
(ZENIT Noticias – IFN / Roma, 21.11.2023).- En abril de este año, el gobernador de Dakota del Norte, Doug Burgum, firmó un proyecto de ley que protege a los bebés a partir de la sexta semana de gestación, momento en el que se puede detectar el latido del corazón. Desde la histórica sentencia del Tribunal Supremo de Estados Unidos, este es el decimotercer estado que introduce estrictas salvaguardias para proteger a los no nacidos.
#WeCount, una empresa de la proabortista Sociedad de Planificación Familiar, constató un descenso del número de abortos en cada mes de julio a diciembre en comparación con la cifra de referencia de abril de 2022. La tasa nacional documentada de abortos descendió de 13,2 por cada 1.000 mujeres a 12,3 por cada 1.000 mujeres en el mismo periodo comparable. Sin embargo, mientras que el número de abortos disminuyó en general, el informe señaló que los abortos químicos, en los que las mujeres toman píldoras en casa recetadas por proveedores virtuales de telemedicina, aumentaron un 137% de abril a diciembre de 2022. Los investigadores calcularon las cifras finales basándose en las estadísticas presentadas por las clínicas responsables de alrededor del 83% de todos los abortos realizados en Estados Unidos.
El gobernador de Misisipi, Tate Reeves, también firmó ocho medidas provida, entre ellas una ley que aumentará de 3,5 a 10 millones de dólares el crédito fiscal para clínicas antiaborto y centros de recursos para embarazadas, otra que creará una web estatal con información sobre cómo encontrar recursos provida, y también la llamada ley de entrega de bebés, que ampliará el plazo en el que una madre puede entregar a su hijo a un «refugio seguro» para su adopción. En respuesta a la noticia, Caitlin Connors, directora regional para el sur de Susan B. Anthony Pro-Life America, declaró: «Es asombroso ver cuánto terreno ha cubierto Mississippi en el transcurso de un año para proteger a los no nacidos».
En marzo, los legisladores de Florida aprobaron un proyecto de ley para prohibir el aborto una vez detectado el latido del corazón del bebé (6 semanas). Todo indica que, en este 2023, los abortos seguirán disminuyendo siempre que los republicanos mantengan sus promesas provida y no se vuelvan infieles, como han hecho recientemente en Nebraska y Carolina del Norte, donde las medidas que habrían restringido gravemente el aborto fueron rechazadas precisamente porque la mayoría «republicana» votó en contra del derecho a la vida del no nacido y se puso del lado de los demócratas proabortistas. Los republicanos deben tomar una decisión clara a favor del derecho y la dignidad de la vida del no nacido, mientras que los demócratas siguen siendo los verdaderos y únicos aliados de los abortistas.
