(ZENIT- 21 sept. 2019).- En la tarde de hoy, 21 de septiembre de 2019, el Santo Padre Francisco se dirigió a Albano, municipio italiano de la provincia de Lazio donde tenía prevista una visita pastoral.
A su llegada, el Papa fue recibido frente a la catedral de Albano por el obispo de la diócesis, Mons. Marcello Semeraro, el párroco de la catedral, Mons. Adriano Gibellini, y el alcalde de la ciudad, Nicola Marini. También estaban congregadas personas de todas las edades, a las que el Papa saludó y agradeció su presencia.
El alcalde entregó al Papa Francisco las llaves de la ciudad y unos regalos, y también le mostró el «mural» creado especialmente para su visita. Después, el Santo Padre se dirigió al interior de la catedral de san Pancracio, donde dirigió una oración con los sacerdotes y las personas presentes. Al final de la plegaria, todos ellos se acercaron a saludar al Pontífice.
La idea de la visita
En una entrevista publicada en la edición del 21 de septiembre de L’Osservatore Romano, Mons. Marcello Semeraro, obispo de Albano, explica cuáles son las claves de la visita del Papa Francisco a esta diócesis.
Hace unos meses, Mons. Semeraro propuso al Papa Francisco celebrar con sus fieles la fiesta de San Mateo, el 21 de septiembre, una fecha especial tanto para el Pontífice como para la comunidad de Albano.
Por una parte, se trata de una fecha importante en la vida del Santo Padre, ya que en este día percibió su vocación sacerdotal. Al mismo tiempo, el 21 de septiembre de 2008, el Papa Benedicto XVI acudió a Albano para dedicar el renovado altar mayor de la catedral y también se inauguró la cátedra episcopal.
Desde entonces, la visita de Benedicto XVI, indica el prelado, se convirtió en punto de referencia para celebrar el aniversario de dicha dedicación.
Mural del Papa Francisco
El mural que el Papa observó en la entrada de la catedral, titulado Exemplum Omnibus, constituye un regalo de la ciudad y de la diócesis de Albano con ocasión de su visita.
Esta gran pintura es obra de Mauro Pallotta, alias MauPal, célebre artista callejero romano que ya fue noticia anteriormente por haber pintado el “Superpapa”, un grafiti que representaba al el Santo Padre como un superhéroe.
La obra ocupa toda la fachada de un edificio de la Curia frente a la catedral de san Pancracio y el Papa Francisco aparece como un obrero que intenta limpiar el cielo contaminado.
Según indica Vatican News, el propio autor ha revelado que el mural está inspirado en el tema de la protección de la creación y en el contenido de la encíclica Laudato sí’. Por este motivo, pintó al Papa Francisco como un humilde limpiador de la niebla del cielo, para que el sol vuelva a brillar. De esta manera, trata de ratificar que el magisterio del Papa Francisco es un “ejemplo para todos”.
Según el citado medio, para este mural de unos 7 metros por 5 se emplearon 12 kilógramos de pintura de cuarzo blanco, negro, azul, rojo y amarillo. Los gastos de su fabricación fueron patrocinados por los comerciantes de la ciudad y por el municipio.
Trabajo pastoral: evangelización y discernimiento
En esta visita, Mons. Semeraro, pretende presentar al Obispo de Roma el trabajo pastoral de la diócesis de Albano, que, explica su obispo en la citada entrevista de L’Osservatore Romano, provino «de las indicaciones del Papa” y está constituido por temas que datan de 2008.
Entre estos se encuentra, en primer lugar, la evangelización. La labor evangelizadora de esta Iglesia local, fue confirmada por la Exhortación Evangelii Gaudium en 2013, que Francisco señaló como programa del pontificado y sobre la que pidió que se profundizara.
La diócesis de Albano ya estaba trabajando entonces “en un proyecto que yo llamo pastoral generativa, es decir, que no se trata de hacer cosas, sino de dar a luz algo. Las indicaciones de Evangelii gaudium nos han animado”, señaló Mons. Semeraro.
Igualmente, el obispo relató que las palabras del Santo Padre a los jesuitas en la JMJ de Polonia (2016), en torno a la idea de que la Iglesia del tercer milenio debía ser “la Iglesia del discernimiento”, les llevaron también a enfocarse en este aspecto.
Atención a las familias
En cuanto a las obras concretas que se desarrollan en Albano, Mons. Semeraro contó en sus declaraciones que sus actividades no están dedicadas exclusivamente a los pobres, sino que también realizan una labor de acogida de las familias en dificultad, una iniciativa única en toda la región de Lacio.
Asimismo, se trata de un lugar de recepción para toda la familia, que no distingue entre padres y madres.
En esta misma línea, a partir del año de la Misericordia, surgió la idea de crear un hogar para aquellos padres separados que ya no tienen donde vivir y se ven obligados a dormir en un coche. Así, los discípulos del Divino Maestro proporcionaron sus instalaciones de verano y algunos franciscanos de la tercera orden regular comenzaron a dirigir la casa.
“Casa del Discernimiento”
Además, existe el proyecto pastoral de la “Casa del Discenirmiento”, fruto de una serie de conversaciones con jesuitas, que demandaron al obispo un espacio en el que celebrar reuniones, retiros y conferencias de los que ellos se encargarían. Como resultado, la casa que el obispo auxiliar, que ya no usa, se ha convertido en un lugar de recepción de grupos de jóvenes.
La otra iniciativa, también en colaboración con los jesuitas, es la formación de una familia intercongregacional para trabajar en la protección de menores y adultos vulnerables.
En octubre comienza un curso de especialización de seis meses para sensibilizar sobre la protección de menores y adultos vulnerables y las hermanas trabajarán en la pastoral escolar.
La sociedad civil de la comunidad de Albano también participa en todos estos proyectos caritativos.